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Cientos de voluntarios madrugaron este domingo para ultimar los detalles de la organización de la llegada de Benedicto XVI ahasta la Sagrada Familia. Las monjas benedictinas de Montserrat han sido las encargadas de elaborar 300 copones para esta ocasión y 340 jóvenes voluntarios han acompañado a los sacerdotes mientras repartían la comunión y han sujetado el paraguas azul que les cubría. (07/11/2010)

Diversas protestas se han producido en Barcelona coincidiendo con la estancia del Papa, entre las que han destacado una manifestación contra esta visita, un acto convocado por la denominada "plataforma de mujeres contra el Papa" y otro protagonizado por colectivos de gays y lesbianas.Los homosexuales han protestado en las calles de la Ciudad Condal por la postura del Vaticano ante sus derechos. pedían respeto a su condición. (07/11/2010)

Federico Lombardi, portavoz de la Santa Sede, ha se ha referido a las declaraciones del Papa en las que vinculaba el laicismo de la España actual con el anticlericalismo de los años 30. Lombardi ha dicho que no estaba en la intención del Papa crear polémica: "Quien oiga estas palabras puede interpetarlas con gran naturalidad, como ya hemos hecho, sin provocar problemas que creo que no están en la mente del Papa, ciertamente". Lombardi ha remarcado que las afirmaciones del Papa no son resultado de un "estudio ni análisis histórico". "En cada país vemos tensiones y todos lo sabemos: no es ninguna sorpresa".

La centenaria obra del arquitecto Antoni Gaudí ya es basílica. Siguiendo el ritual, Benedicto 16 ha celebrado la misa de dedicación al culto. El Papa ha bendecido el altar con agua bendita y lo ha rociado de aceite. Más de 6.500 personas, con invitación, han asistido a la misa. Otros miles le han esperado fuera, con el ángelus. En su homilia, el Papa ha pedido proteger el matrimonio entre el hombre y la mujer, y ha rechazado el aborto.

El papa Ratzinger ha defendido la necesidad de que el Estado proteja el matrimonio tradicional y el hecho de que la mujer pueda trabajar fuera y dentro del hogar (que pueda conciliar vida laboral y familiar). "La sociedad ha cambiado mucho", ha aseverado Benedicto XVI, "ha habido muchos progresos, pero también deben estar los progresos morales, como la atención, protección y ayuda a la familia, la unión de un hombre y una mujer", ha continuado. "El hombre y la mujer que forman una familia debe ser protegida por el Estado, que también debe proteger la vida de los no nacidos. Por eso la Iglesia se opone a todas las formas de acabar con la vida", ha asegurado Benedicto XVI.