Arranca en México la cumbre entre los presidentes de EEUU, México y Canadá, con temas como la migración o el comercio en la agenda de la reunión. Muy pendientes de la situación en Brasil tras el asalto a las sedes de los principales poderes del estado brasileño por parte de seguidores del expresidente Jair Bolsonaro.Condenas internacionales a nuevas ejecuciones y sentencias contra los manifestantes anti-régimen en Irán. China, Pakistán y mucho más.
Entrevista en el Telediario a la experta en política en Iberoamérica, Anna Ayuso, del Centro de análisis CIDOB para analizar la situación en Brasil y las similitudes con lo ocurrido en el Capitolio de EE.UU. en 2021 tras el asalto perpetrado por los simpatizantes radicales de Bolsonaro a las sedes de los poderes del Estado. Los asaltantes y los sectores más radicales del bolsonarismo llevan meses pidiendo al ejército una intervención, dicen que las elecciones que Lula ganó fueron fraudulentas, sin embargo, como explica la analista, no hay pruebas de que lo fueran.
Miles de seguidores del expresidente brasileño Jair Bolsonaro han invadido este domingo en Brasilia el Congreso Nacional, el Palacio presidencial y la Corte Suprema, los tres poderes del Estado. Paulo Abrão, exsecretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y actual director de Washington Brazil Office, lo define como una crisis anunciada: "Durante sus cuatro años de gobierno, Bolsonaro estimuló la creación de estos rupos extremistas radicales". La tardía intervención de las fuerzas de seguridad se debería, según Abrão, a una contaminación de este extremismo en "sectores de seguridad nacional y de la inteligencia", propiciada por el papel activo de perfiles militares y policiales en el gobierno de Bolsonaro. Con todo, asegura que "existe una gran confianza en la capacidad de mediación y de conciliación que Lula personalmente proyecta", algo que "será determinante para evitar una crisis institucional en el país". Sobre el paralelismo inevitable con el asalto al Capitolio de los Estados Unidos, Abrão afirma que "Bolsonaro nunca escondió su admiración por Trump". Aún más, cree que siguió los mismos tres pasos fundamentales: desinformación, deslegitimación de las instituciones y activación de grupos radicales dispuestos a atacar.
Miles de seguidores del expresidente Jair Bolsonaro se han lanzado contra las sedes de los tres poderes del Estado brasileño: Congreso, Presidencia y Corte Suprema. Mientras destrozaban todo a su paso, expresaban su disconformidad con la victoria de Lula da Silva y cuestionaban la transparencia de las elecciones.
En RTVE analizamos al excorresponsal en Brasil Marcos López los escenarios que se abren para este país, más polarizado que nunca tras estos incidentes.
Miles de seguidores del expresidente Bolsonarose abalanzaron el domingo sobre las sedes de los tres poderesdel Estado: el Congreso, la Presidencia y la Corte Suprema de Brasil. Expresaban destrozando todo lo que encontraban a su paso, lo que repiten desde que se conoció la victoria de Lula, que no confían en la validez de las elecciones. Por ello, piden una intervención militar que acabe con su gobierno una semana después de su embestidura.
El asalto a las instituciones en Brasil ha enfrentado al Gobierno de Pedro Sánchez con la oposición. Desde el Ejecutivo han calificado de "irresponsable" y exigen una rectificación por la reacción en Twitter de la Secretaria General del PP, Cuca Gamarra, que sin condenar lo ocurrido aprovechó para cargar contra Pedro Sánchez por eliminar el delito de sedición. Núñez Feijóo, por su parte, llamó a restablecer el orden constitucional en Brasil, pero sin mencionar a Lula. El PP defiende que su apoyo estaba implícito.
El presidente de EE.UU., Joe Biden, ha condenado el asalto de los seguidores de Jair Bolsonaro a las sedes del Congreso, la Presidencia y la Corte Suprema de Brasil y muestra su apoyo total a las instituciones democráticas brasileñas.
Miles de seguidores del expresidente brasileño Jair Bolsonaro han invadido este domingo en Brasilia el Congreso Nacional, el Palacio presidencial y la Corte Suprema, los tres poderes del Estado. Anna Ayuso, investigadora principal de América latina del CIDOB, ha asegurado en Las Mañanas de RNE, que el seguimiento de este golpismo “es minoritario y no es apoyado por la mayoría de la sociedad brasileña.” Ha añadido que hay una “polarización que ha llevado a un enfrentamiento donde las reglas democráticas se están poniendo en tensión.” Anna Ayuso ha explicado que gran parte de la población en Brasil piensa que “los políticos son corruptos y esto afecta a la credibilidad de las instituciones.” En relación con el trumpismo, Ayuso ha asegurado que el asalto al Capitolio en Washington ha tenido un efecto de emulación con este suceso porque “si no hubiera habido un asalto al Capitolio no se les hubiese ocurrido a estos radicales asaltar las instituciones en Brasilia.” Y considera que las redes sociales han intervenido más que los medios de comunicación tradicionales.