En Asturias todas las localidades del temporal hacen balance de los daños causados por el mar. El fuerte oleaje que azota la cornisa cantábrica ha sido especialmente duro con Luanco. El muro de la playa de la Ribera (Luanco) ha quedado agujereado. Ahora ya se trabaja para rellenar el interior del hueco existente, bajo la zona de paseo afectada, mediante hormigón ciclópeo, protegiendo, provisionalmente, su exterior con escollera.
En el País Vasco los afectados tratan también de reparar los daños del temporal. En San Sebastián, el Peine del Viento amanece irreconocible. Sólo se han salvado las esculturas de Chillida; pero pesados bloques de piedra han sido desplazados varios metros por la fuerza del mar, que también ha causado importantes daños en el pavimento de granito. Aún es pronto para calcular cuánto costará repararlo todo.