- "La llegada de los españoles representó sometimiento e incluso eliminación de los pueblos", dice la presidenta de México
- Sheinbaum animó a España a usar el 12 de octubre para comenzar con la disculpa pública a los pueblos originarios mexicanos
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha reformado la política de seguridad sin cuestionar el fracaso de su antecesor, Andrés Manuel López Obrador. La reforma mantiene la atención a las causas de la violencia, sobre todo para impedir que los jóvenes caigan en las redes del narco. Pero aumenta los poderes de la Guardia Nacional, activa el uso de la inteligencia policial y militar y potencia la coordinación entre el Gobierno, estados y Fiscalía. El primer gran reto de la ley es que el Estado recupere los territorios de los que se ha replegado. Uno de ellos es Guerrero, conmocionado por el brutal y reciente asesinato del alcalde de la capital. El domingo apareció descuartizado. Su cuerpo en el interior de un vehículo y su cabeza expuesta en el capó. Al parecer, se resistió al poder del narco.
- El asesinato del alcalde de la capital de Guerrero se produjo solo seis días después de llegar al cargo
- Alejandro Arcos repetía en todo momento a TVE durante la campaña electoral que su objetivo era pacificar la ciudad
- La nueva presidenta de México asegura que la relación bilateral sigue siendo "buena" al margen de esta cuestión
- España decidió no enviar a nadie a la toma de posesión por la no invitación a Felipe VI
La nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha protagonizado el ritual de limpieza y purificación de manera pública y como una forma de potenciar las raíces indígenas de México, así como su compromiso feminista. Ante ella se encontraban mujeres de 70 pueblos originarios, y una de ellas le ha entregado el bastón de mando, símbolo del poder político y espiritual de las comunidades indígenas. Con una plaza del Zócalo repleta, la presidenta ha enumerado los 100 compromisos de su sexenio que ahora arranca, entre las que ha destacado la "independencia" y "soberanía" del país. En general ha sido un discurso continuista, repleto de alabanzas al presidente que le ha cedido la banda presidencial, Andrés Manuel López Obrador. Pero no ha olvidado lanzar un guiño a los inversores extranjeros a los que ha garantizado estabilidad y seguridad jurídica.
- La nueva presidenta mexicana ha destacado la creación de una Secretaría de las Mujeres en su gabinete
- Sheinbaum también ha expresado su voluntad de reducir la jornada laboral a 40 horas semanales, entre otras promesas
- La nueva mandataria se enfrenta a varios retos relacionados con la inseguridad y la brecha social
- La toma de posesión se realiza sin representación de España, pero con la asistencia de algunos políticos españoles
Claudia Sheinbaum ha asumido este martes el cargo como la primera mujer presidenta de México para el sexenio de 2024 a 2030, en una ceremonia en la Cámara de Diputados a la que asistieron casi una veintena de mandatarios internacionales y cientos de representantes de países y organismos multilaterales. En México, un país inmerso en el machismo y en donde siete de cada 10 mujeres han experimentado algún tipo de violencia, la toma de posesión de Sheinbaum es un hito y muchos lo consideran símbolo del empoderamiento de las mujeres. Entre las varias promesas que ha lanzado destaca la garantía de salvaguardar todas las libertades, ya sea la de expresión, de prensa, de reunión, o de movilización. Asimismo, ha alabado la labor del presidente saliente, López Obrador, y ha prometido continuar con el "humanismo mexicano".
Nadie representará a España en la toma de posesión de Claudia Sheinbaum, quien se ha convertido en la primera mujer presidenta de México. La no-invitación al Rey es la primera decisión propia de la nueva presidenta, al parecer incluso en contra del criterio de López Obrador. Como nueva mandataria, tiene previsto varios proyectos, en su mayoría sustentados en lo que se ha hecho a lo largo de los años. Por delante, tiene seis años de enormes retos. El primero: la seguridad, con casi 30.000 asesinatos al año y parte del territorio controlado por el crimen organizado. También deberá reducir los feminicidios, que han subido durante el último sexenio. La economía está amenazada por el temor de los inversores extranjeros a una mayor inseguridad jurídica, resultado de la reforma judicial que llevará a que los jueces sean elegidos por votación popular. Y el gran reto eternamente aplazado: la transformación energética para dejar atrás el petróleo y fomentar energías limpias.
La presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, tomará posesión como la primera mujer presidenta de México para el sexenio de 2024 a 2030. En Las Mañanas de RNE, Anna Ayuso, investigadora sénior de América Latina en el CIDOB, ha comentado que durante la campaña electoral Sheinbaum se ha declarado heredera de las políticas de Manuel López Obrador y que su mandato sería una continuidad de este.
Para Anna Ayuso, Claudia Sheinbaum se tendrá que enfrentar a dos retos heredados de Obrador: "Por un lado, tendrá que tratar de resolver el bajo crecimiento y el déficit fiscal. Estas políticas que han hecho, no han ido acompañadas de una reforma fiscal que permita que el Estado tenga suficiente recaudación. Entonces, tienen que hacer una reforma fiscal y ahí van a tocar el hueso duro", ha considerado.
Según la investigadora, el segundo reto de la presidenta mexicana será la seguridad del país que no ha mejorado, sino que las cifras de muertos siguen creciendo: "Hay zonas del país que están prácticamente fuera del control de las fuerzas de seguridad y no parece que haya todavía un plan realmente claro para cómo hacer frente a esa situación". Asimismo, gran parte de esta inseguridad proviene del narcotráfico, ya que estos carteles de drogas también están "permeando en algunas instituciones", por lo que la corrupción es otra asignatura pendiente. Entrevista completa en RNE Audio.
El que ha sido hasta el momento presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se retira y empieza una nueva época en la política del país. Llega al poder la primera presidenta, mujer: Claudia Sheinbaum, que arranca su mandato marcada por la polémica de no haber invitado a su toma de posesión al rey Felipe VI.
En este sexenio que comienza, Sheinbaum espera poder dar solución a temas que López Obrador ha dejado pendientes de resolver, como son el crimen organizado, que controla parte del país, o la incertidumbre que atraviesa el panorama económico mexicano.
- La nueva presidenta deberá tomar decisiones complejas en seguridad, economía y transformación energética
- López Obrador deja un complejo mapa de relaciones internacionales
- López Obrador pidió que Felipe VI se disculpara por los "atropellos" de la conquista, pero nunca obtuvo respuesta
- El Gobierno de España decidió no participar en la ceremonia de transferencia del poder presidencial, en la que sí estará Sumar
En 'Las Mañanas de RNE' preguntamos: "¿Crees que España debería pedir perdón a México?". Alberto Ibáñez, autor de 'La leyenda negra. Historia secreta del odio a España', considera que "lo que hay detrás es una expresión más de ese populismo que ha caracterizado el mandato de López Obrador". "No es una cuestión de pedir perdón o no, sino de constatar cómo fue al historia y contemplarla de una manera mucho más objetiva y menos ideologizada", asegura Ibáñez. El escritor explica que, hace 200 años, "México era la región comercial más potente comercialmente del mundo". "No han sabido explicar por qué algo próspero ha acabado siendo pobre. En vez de asumir la responsabilidad de sus propios errores, acuden a un instrumento muy frecuente que es el chivo expiatorio, en este caso, España".
Y entre el Gobierno y sus socios parlamentarios se ha abierto otra brecha, esta vez, por la crisis diplomática con México. El PSOE no oculta su enfado por la decisión de Sumar y otros partidos de acudir a la toma de posesión de Claudia Sheinbaum. Les recuerdan que ese país ha vetado al rey, al jefe del Estado y que la posición oficial de España es no asistir.
- Se ha pronunciado así en un acto con Aznar y Metsola, al que ha acudido Edmundo González
- Critica la doble vara del Ejecutivo para hacer frente a los conflictos diplomáticos y alude a la crisis con Argentina
- España ha decidido no mandar a ningún representante a la toma de posesión como respuesta a la no invitación del rey
- La presidenta electa, Claudia Sheinbaum, sigue la línea de su antecesor y se mantiene en la necesidad de que se pida perdón
La toma de posesión de la nueva presidenta de México abre un nuevo frente diplomático al Gobierno. Pedro Sánchez considera "inaceptable" que Claudia Sheinbaum no haya invitado al rey porque España no se ha disculpado por la conquista. "Parece que no podemos normalizar nuestras relaciones políticas por algo en lo que España ya ha fijado una posición de empatía con la sociedad mexicana", ha afirmado en una comparecencia. Andrés Manuel López Obrador ha dicho que respalda plenamente a Sheinbaum y ha pedido a España que abandone su prepotencia.
- "No aceptamos la exclusión de nuestro jefe del Estado", ha afirmado el presidente español
- Ha trasladado su "enorme tristeza" por no poder tener "las mejores relaciones" por "el interés político"
- "¡Viva México, cabrones!", ha exclamado Gabriel Rufián en los pasillos del Congreso
- Sumar acata la decisión del Gobierno, pero defiende que México es un país soberano para decidir a quién invita