La Unión Europea ha trazado hoy una línea roja. A un lado, en el de los sospechosos, han colocado a Italia. Silvio Berlusconi ha sido reprendido en privado por Merkel y Sarkozy y en público por el presidente del Consejo. "Le hemos pedido a Italia que nos dé garantías de que las medidas valientes que se aprobaron se van a poner en marcha a tiempo", decía Herman Van Rompuy, antes de exigir al primer ministro italiano un calendario concreto de desarrollo de la reforma laboral, de las medidas contra el fraude fiscal o de las privatizaciones.
A la misma hora, Nicolas Sarkozy, en una comparecencia conjunta con Angela Merkel, elogiaba a nuestro país. "España ya no está en primera línea de los problemas económicos y financieros de la zona euro por los enormes esfuerzos del gobierno de Rodríguez Zapatero y al sentido de la responsabilidad de la oposición de Mariano Rajoy".
Merkel y Sarkozy han confirmado los progresos hechos para reforzar el Fondo de Estabilidad. Hasta el miércoles no se cerrarán los acuerdos sobre este instrumento, la recapitalización bancaria y Grecia. Será en una cumbre de la zona euro, precedida de otra de los 27 que pretende evitar los recelos de países como Reino Unido o Suecia, fuera de la moneda única, pero afectados por sus decisiones.
Los Veintisiete han finalizado la reunión sin ningún acuerdo concreto, aunque con buenas sensaciones para llegar a un acuerdo global para atajar la crisis de deuda el próximo miércoles en una nueva cumbre extraordinaria de la UE. Además, se han mostrado decididos estudiará una reforma de los tratados para aumentar disciplina fiscal. Y, en centro de todas las miradas, Italia, país presionado por el resto de socios para que cumpla con lo prometido y reduzca su deuda. Así lo ha reconocido el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, que se vio con el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, antes de reunirse con el resto de líderes. "Le hemos pedido que nos dé garantías de que las medidas valientes que se aprobaron se van a poner en marcha a tiempo", ha señalado en la rueda de prensa posterior al consejo, donde también ha reconocido que Roma debe hacer "reformas en el mercado laboral o emplearse a fondo para luchar contra fraude fiscal".
El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, ha asegurado este domingo que gracias a los "esfuerzos" del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y a la "responsabilidad" del líder del PP, Mariano Rajoy, España "ya no está en primera línea" de la crisis de deuda. En rueda de prensa conjunta con la canciller alemana, Angela Merkel, ambos dirigentes han lanzado un toque de atención a Italia y Grecia. "España, gracias a los enormes esfuerzos del Gobierno del señor José Luis Rodríguez Zapatero y el sentido de la responsabilidad de la oposición del señor Mariano Rajoy, ya no está en la primera línea" de países con problemas, ha destacado el presidente galo en una rueda de prensa conjunta con la canciller alemana, Angela Merkel, tras acabar la reunión del Consejo Europeo.
"La cumbre de hoy no va a tomar decisiones concretas. Estas se adoptarán formalmente el próximo miércoles", subrayaba antes del inicio del Consejo Europeo la canciller alemana, Angela Merkel. Y no se equivocaba porque, los Veintisiete no han llegado a ningún acuerdo concreto este domingo, jornada en la que se suceden las reuniones para analizar los preacuerdos alcanzados este sábado por el Eurogrupo y el Ecofin para calcular las necesidades de capital de los bancos y la cantidad de deuda que deberá perdonarse a Grecia. El documento de conclusiones de la reunión se limita a hacer recomendaciones genéricas. "La consolidación fiscal y la reducción de la deuda son cruciales para asegurar la sostenibilidad de las finanzas públicas y restaurar la confianza", señala el Consejo Europeo en las conclusiones, donde también se solicita una "acción decidida" para reforzar la economía, "asegurar unas finanzas públicas sostenibles y crear empleo y crecimiento". Se espera a las reuniones de los jefes de Estado y Gobierno de la zona euro, que engloba a 17 países, que tienen lugar en la tarde del domingo y el miércoles, para decidir cuestiones más específicas como el refuerzo del fondo de rescate europeo, el ajuste de la participación del sector privado en el segundo rescate de Grecia (el porcentaje de la quita) o el cálculo de la necesidad de capital de la gran banca. Este se cifró en 100.000 millones de euros y, en el preacuerdo, podría aceptarse una posible depreciación de la deuda española, por debajo del 2%, pero solo de forma hipotética, para establecer el supuesto teórico en el que se moverían los nuevos test de estrés.
La canciller alemana, Angela Merkel, ha instado a España a introducir más reformas para lograr la reducción de su nivel de endeudamiento como única fórmula viable para recuperar la confianza de los mercados. En un acto de las juventudes de la Unión Cristianodemócrata que preside en la ciudad de Braunschweig, al norte del país, Merkel ha señalado que "España ya ha hecho mucho pero probablemente debe hacer más para recuperar la confianza de los mercados". Merkel también ha pedido a Italia más esfuerzos porque ha asegurado que el nuevo fondo de rescate de la eurozona no se sostendrá si la deuda de Italia se mantiene alta (en estos momentos es del 120%).
Los ministros de Finanzas de la zona euro han llegado a un acuerdo a última hora del viernes para solicitar a los bancos privados acreedores que acepten 'perdonar' a Grecia una parte de su deuda.
Las Bolsas europeas han registrado fuertes ganancias por las expectativas ante posibles acuerdos en el seno de la Unión Europea, sobre la ampliación del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera este fin de semana. La prima de riesgo española, que mide la rentabilidad extra de los títulos españoles frente a los alemanes, también se beneficia y cae a 335 puntos, ocho puntos menos que en la jornada anterior.
El Ibex-35 sube un 2,84% y se coloca en los 8.853 puntos con todos sus valores en positivo. Las ganancias se han moderado al final de la jornada, pero han llegado a superar el 3%. Los grandes valores bancarios, BBVA y Santander suben un 2,51% y un 2,92% respectivamente. Telefónica, el 3,85%; Iberdrola, el 3,38% y Repsol, el 1,29%.
Sacyr Vallehermoso ha subido un 2,85%, un día después de conocerse la destitución de su presidente Luis Del Rivero, después de que se produjeran discrepancias en el seno de la compañía sobre la participación que mantiene en la petrolera Repsol. El nuevo presidente de Sacyr, Manuel Manrique, y el responsable de Repsol, han mantenido este viernes un encuentro que fuentes próximas a los contactos califican como "provechoso". La petrolera española ha ganado un 1,29% en la Bolsa este viernes.
El resto de mercados terminan con subidas incluso superiores a la del selectivo español. Fráncfort encabeza las ganancias con el 3,55%, seguida por París, que gana un 2,83%, Milán que ha subido un 2,80% y Londres que ha ganado un 1,87%. Mientras, Lisboa sube, aunque menos, un 1,37%.