Para evitar que los más de 50 brotes detectados en España vayan a más, cientos de rastreadores buscan el origen del contagio. Cada día hacen decenas de llamadas para contactar con los posibles infectados. Algo fundamental para una detección precoz. [Coronavirus: última hora en directo]
La persona que haya dado positivo tiene que rellenar una hoja en la que debe anotar los nombres de cualquier persona con la que haya estado a menos de dos metros, durante más de quince minutos, en los dos días previos a que presentara síntomas. Se lo considera contacto estrecho y hay que vigilarlo.
Normalmente el seguimiento lo hacen por teléfono, pero en casos como el brote de Cantabria, han ido puerta por puerta.