El presidente electo de Irán, Mahmud Ahmadineyad, ha jurado su cargo para un segundo mandato mientras la Policía ha impedido las protestas de los opositores congregados en las inmediaciones del Parlamento islámico.
Según varios testigos, las fuerzas policiales han detenido a varios manifestantes y han dispersado con gases lacrimógenos a cientos de seguidores del líder reformista Mousaví, que continúan denunciando fraude en el escrutinio de las elecciones del pasado 12 de junio.