Cerca de Camarasa, en Lleida, venden por casi un millón de euros un poblado rodeado de naturaleza: 1.800 metros cuadrados, siete casas, piscina, pista de tenis y jardines. Hace casi un siglo alojó a ingenieros y directivos de una central eléctrica.
Los vecinos de la zona esperan que deje de estar abandonado, pero creen que será difícil encontrar un comprador. Más optimistas son desde el ayuntamiento. Lo ven como una oportunidad: "Daría riqueza al territorio y sobre todo si se enfoca a turismo de calidad, turismo con ganas de venir y descubrir un entorno y respetarlo".
Foto: Viejo puente de Camarasa (Getty Images)