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San Ignacio del Viar es una pedanía con apenas 800 vecinos y un colegio con 70 alumnos que ha sido seleccionado entre 2.400 centros en todo el mundo para conectarse con el espacio. Una misión que necesita una tripulación y técnicos que hagan posible la comunicación en tiempo real con una estación que viaja a 27.000 kilómetros por hora. La tarea era compleja, pero los alumnos lo han logrado, metiéndose "tanto en el papel que han aprobado incluso su Constitución lunar". Un pequeño encuentro, pero una gran experiencia, para este colegio sevillano ubicado en Alcalá del Río.

Sara García es una de las ocho mujeres que forma parte de la nueva generación de astronautas de la ESA, y ya está lista para marcharse a Alemania. El 28 de octubre comenzará en Colonia un intenso entrenamiento como reservista, que incluirá astrofísica, mecánica orbital y técnicas para condiciones extremas. Esta oncóloga explica que decidió enfundarse en el traje de astronauta debido a la relación que existe entre la ciencia y el espacio. "Gracias a los estudios que se llevan a cabo en la Estación Espacial Internacional en microgravedad es posible avanzar en enfermedades, el envejecimiento, cáncer, generar nuevos materiales y nuevas aplicaciones", señala.

Suni Williams y Butch Wilmore llevan casi cuatro meses en el espacio y todavía les quedan, al menos, cinco más. "Echamos de menos a nuestras familias, a mis dos perros, a mis amigos" asegura la comandante Wiliams, "pero hay mucha gente mandándonos mensajes de apoyo y nos hace sentir como en casa".

El pasado 5 de junio, la NASA y Boeing lanzaron el primer vuelo tripulado de la nave Starliner CST-100. Concebida como un 'taxi espacial' capaz de llevar a los astronautas hasta la Estación Espacial Internacional. En esa operación viajaban Butch Wilmore y Suni Williams, que tenían previsto volver a los siete días. Sin embargo, debido a problemas técnicos que ha sufrido la nave, continúan atrapados en ella.

Jared Isaacman y Sarah Gillis se han convertido en las primeras personas que realizan una caminata espacial privada. El éxito de la misión de ‘Polaris Dawn’ de Space X contrasta con la situación de los dos astronautas ‘varados’ en la Estación Espacial Internacional tras no poder regresar a bordo de la cápsula Starliner de Boeing.

¿Le está ganando la empresa de Elon Musk la carrera espacial a Boeing? “Claramente sí, desde hace años. Esto de Starliner ha sido la gota que ha colmado el vaso”, afirma Javier Pedreira, responsable de Informática de los Museos Científicos Coruñeses. Pedreira considera que el viaje espacial de Isaacman y Gillis supone un hito muy importante. “Me parece un avance increíble de cara a popularizar el acceso al espacio. Es un poco como cuando se empezó a poder ir en avión. Al principio solo podían ir las personas con mucho dinero y ahora, a veces, te sale más barato un billete a Inglaterra que cenar al lado de casa. Es un poco el principio de ese camino.

El ingeniero aeronáutico leonés Pablo Álvarez, se ha graduado este lunes en el Centro Europeo de Astronautas de la Agencia Espacial Europea (ESA) tras un año de entrenamiento al máximo nivel, con lo que se convierte en el tercer astronauta español en poder viajar en una misión al espacio después del hispano-estadounidense Miguel López-Alegría y Pedro Duque. Álvarez es uno de los nuevos cinco astronautas que fueron seleccionados entre 22.500 candidatos en 2022. Los graduados están listos para ingresar a la siguiente fase de preparación de la Estación Espacial, denominada entrenamiento previo a la asignación. Tras completar esto, se les asignará una misión y se llevará a cabo una capacitación específica. Se estima que el primer astronauta volará al espacio a comienzos de 2026, siendo la Estación Internacional el destino previsto, cuya duración rondaría los seis meses.