El antiguo modelo económico del gigante asiático le llevó a crecer hasta un 12% anual y, con el resto países de emergentes, fue durante un tiempo el que tiraba de economías maduras como Estados Unidos y Europa. Entonces, los chinos no paraban de exportar y potenciaban la inversión y la industria, con debilidades que ahora quedan al descubierto.
Las autoridades chinas han eliminado el mecanismo automático de suspensión de las Bolsas en caso de movimientos bruscos. La decisión llega después de que el nuevo mecanismo, que entró en funcionamiento el 1 de enero, haya causado ya el cierre anticipado de los mercados en dos de los cuatro días hábiles de 2016: el pasado lunes y este jueves, cuando la sesión duró menos de media hora.
El IBEX 35, que ha llegado a perder los 8.900 puntos durante la sesión, ha conseguido cerrar por encima del nivel de los 9.000 puntos (en 9.059,30), tras caer un 1,50%, afectado por la caída del precio del petróleo, la devaluación del yuan y el desplome del mercado chino, donde este jueves se han vuelto a suspender las operaciones antes de tiempo tras registrarse caídas de más del 7%. Las pérdidas han sido más cuantiosas en la Bolsa de Fráncfort, cuyo índice DAX ha retrocedido un 2,29%.
En menos de una semana la Bolsa china ya ha aplicado dos veces el cortafuego que rige desde principio de año: si las caídas superan el 7%, echan el cierre hasta el día siguiente. Son jornadas convulsas para la economía china, en pleno cambio de un modelo basado en la exportación y la inversión a otro más de consumo interno y servicios. Muchos inversores particulares chinos están entrando y como no tienen cultura financiera, al menor dato algo negativo se asustan y hay ventas masivas. La economía china se desacelera: el aumento del PIB ronda el 6%, casi la mitad que en sus mejores tiempos.
La onda expansiva de la caída de las Bolsas chinas ha teñido de rojo las plazas del Viejo Continente después de haber dejado un reguero de pérdidas en el sudeste asiático. La más perjudicada ha sido la Bolsa de Fráncfort ya que el DAX, su principal índice, se ha desplomado un 4,28% para firmar su peor arranque de año en los últimos 25 años.En el resto de parqués europeos, el retroceso ha sido más moderado pero ha superado el 3% en Milán, en concreto el FTSE MIB se ha dejado un 3,20%; mientras en París el CAC 40 ha bajado un 2,47% y en Londres el FTSE 100 ha cedido un 2,39%. Por su parte, el principal indicador de la Bolsa española, el IBEX 35 se ha dejado un 2,42%.
El IBEX 35 ha liderado las caídas entre los índices europeos con una bajada del 3,62% hasta los 9.365 puntos. Los bancos y las empresas energéticas han sido los valores más castigados. Los resultados electorales también han provocado un fuerte repunte de la prima de riesgo de España hasta 125 puntos básicos.
