Es la voz de Lucía, una de las tres personas que se encuentran aisladas en la aldea de El Collado. Ubicada en las denominadas Alpujarras riojanas, allí sufren la virulencia del frío, el hielo y la nieve.
Hoy, día tres de febrero, los riojanos cumplen con una de sus más arraigadas tradiciones, la bendición de los Roscos de San Blas, el santo protector de las gargantas.
Un rito que se cumple en la Catedral de La Redonda, en Logroño, y en otros templos riojanos. Según cuenta la tradición, el Santo era conocido por su don de curación milagrosa. Es tradicional bendecir todo tipo de alimentos, en especial pasteles y roscos de San Blas.