Un militante de Greenpeace ha aterrizado con un parapente a motor en la central francesa de Bugey (centro del país), para protestar contra la energía nuclear.
Según la gendarmería del departamento de Ain, citada por AFP, el militante sobrevoló la central poco antes de las ocho de la mañana, lanzó humo y aterrizó en el interior, donde fue detenido.
"El objetivo de esta acción es enviar un mensaje a los candidatos a la elección presidencial (Nicolás Sarkozy y François Hollande) que niegan el riesgo de las nucleares. Queremos ilustrar una agresión externa, como la caída de un avión", ha declarado a AFP Sofía Majnoni, encargada de la campaña antinuclear de Greenpeace en Francia.
Según un portavoz de EDF, la empresa pública que opera la central, en la acción ha colaborado otra persona desde el exterior.