Microsoft, Apple, Nvidia, Alphabet, Amazon, Meta y Tesla. Las grandes tecnológicas de Nasdaq, uno de los principales índices de Wall Street, se desploman y han registrado pérdidas de casi 2,5 billones de euros de su valor en bolsa en el último mes. ¿La razón? No se ha crecido tan rápido como el mercado esperaba en cuestiones como, por ejemplo, la inteligencia artificial.
La mayoría de aerolíneas se recuperaron en días del mayor fallo informático de la historia, pero todavía hay una sigue reponiéndose: Delta. El Gobierno de Estados Unidos ha abierto una investigación a la compañía aérea. Cree que ha sido la que peor ha gestionado el caos tras el error informático. Hasta ayer seguían los retrasos y las maletas varadas en los aeropuertos del país.
FOTO: AP Photo/Michael Dwyer
Una caída que ha dejado a la vista la fragilidad del sistema y lo excesivamente dependientes que somos de la digitalización y de un sistema operativo en concreto. Los expertos dicen que no. Lo que se tiene que hacer es reforzar al máximo los sistemas de respuesta. Los expertos internacionales piden mucha mucha precaución a la hora de hacer las actualizaciones.
Foto: Eduardo Parra/Europa Press
Esta experta en tecnología y ciberseguridad explica en RTVE que el colapso global de miles de dispositivos con el sistema operativo de Microsoft se debe, en términos generales, "a un fallo en la actualización de su antivirus". La periodista recalca que es una situación que podría haberse evitado, ya que "una empresa dedicada a la ciberseguridad debe hacer pruebas antes de lanzar una actualización" de este tipo. Asimismo, Paniagua subraya que las empresas deben de exigir medidas de seguridad a sus proveedores, en este caso Microsoft, copias de seguridad y reaccionar muy rápido. Aunque estos dos últimos pasos sí que han sido seguidos por la gran tecnológica, según apunta la tecnóloga. Por último, incide en la necesidad de "contar con planes de respaldo y seguridad para seguir funcionando de manera analógica" y añade que tardaremos en volver a la normalidad.
Un fallo global en el sistema de Microsoft ha causado este viernes un atasco en los aeropuertos de todo el mundo, además de los problemas que se han reportado en servicios sanitarios, financieros, industria y medios de comunicación. En España, la incidencia ha afectado al mismo operador de aeropuertos, AENA, por lo que todas las aerolíneas pueden haber visto trastornadas sus gestiones de facturación e información a los pasajeros, desatando una cadena de retrasos. En este último caso, Facua recalca que la aerolínea tiene que devolver el importe del vuelo, o dar un transporte alternativo en la fecha que nos convenga. Asimismo, si fuera necesario, tendrá que proporcionar alojamiento en un hotel, además de otros servicios como llamadas telefónicas. El pasajero también podría reclamar una compensación económica, aunque no a la aerolínea. Sin embargo, los expertos aseguran que lo difícil sigue siendo cuantificar el importe de la indemnización, además de ser necesario presentar documentación que lo acredite.
No solo los aeropuertos se han visto afectados por el apagón informático. Algunas gasolineras, supermercados o medios de comunicación han sufrido incidencias. También se ha notado en páginas web que incluyen aplicaciones de Microsoft.
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Mañana de caos en aeropuertos, empresas y medios de comunicación de todo el mundo. Un fallo informático en Microsoft ha provocado este viernes un apagón global en las compañías que lo utilizan y aunque se va recuperando la normalidad, son muchos los sectores que siguen afectados.
En el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid Bajaras, la cola para facturar se veía desde la entrada. Muchos pasajeros han tardado más de dos horas para conseguir la tarjeta de embarque: desesperación y conexiones perdidas para los que empiezan las vacaciones.
Foto: Diego Radamés / Europa Press
¿Cuál ha sido el origen del fallo que ha sembrado el caos informático en todo el mundo? Pues una actualización de un antivirus de una de las mayores plataformas de ciberseguridad, CrowdStrike, que usa Microsoft en su sistema operativo Windows. Los expertos insisten en que es un fallo masivo, pero no se trata de un ciberataque, ni de una brecha de seguridad.
El colapso informático provocado por el fallo de los sistemas de Microsoft ha provocado incidencias a nivel global en aerolíneas, bancos y sistemas sanitarios. Comenzó en Estados Unidos pero se ha extendido por todo el planeta. Un efecto dominó en el que iban cayendo empresas, medios de pago, servicios de emergencia...
Este viernes un fallo informático ha colapsado a escala mundial aerolíneas, medios de comunicación o bancos, entre otros. Se ha producido tras la actualización de un componente de ciberseguridad del sistema de Microsoft. El fallo se conoce como 'pantalla azul de la muerte' que, como explica Jorge Ordás, director de operaciones de INCIBE, pasa cuando "se apaga el ordenador y la pantalla se pone azul [en el sistema de Windows]. Entra en un ciclo que el ordenador se apaga y se vuelve a encender, y no se puede hacer nada". Uno de los sectores más afectados ha sido el aéreo, que a lo largo del día ha hecho frente largas colas en sus mostradores, a cancelaciones y retrasos de vuelos, y a la realización de la facturación de forma manual. Los servicios públicos también han sufrido el impacto del mayor fallo informático de la historia a nivel global, ya que algunos hospitales han tenido que posponer intervenciones quirúrgicas debido a esto. En 14 horas nos acercamos a las corresponsalías de RNE para conocer el alcance de lo sucedido y analizamos los riesgos que suponen.
Los aeropuertos han sido los primeros en resentirse y dar la voz de alarma del apagón informático, que ha impedido a las aerolíneas, y también a bancos, hospitales o supermercados de todo el mundo operar en red y gestionar sus datos. El Ministro de Transportes, Óscar Puente, ha destacado que la caída de Microsoft no está generando en España, a diferencia de otros países, "grandes problemas" y dice que poco a poco se está tratando de recuperar la normalidad.
Los aeropuertos han sido los primeros en resentirse y dar la voz de alarma del apagón informático, que ha impedido a las aerolíneas, y también a bancos, hospitales o supermercados de todo el mundo operar en red y gestionar sus datos. El Ministro de Transportes, Óscar Puente, ha destacado que la caída de Microsoft no está generando en España, a diferencia de otros países, "grandes problemas" y dice que poco a poco se está tratando de recuperar la normalidad.
Durante este enero, y según ciertas estadísticas, 31.000 personas han perdido sus trabajos en las empresas del sector tecnológico en el mundo. Estos números, que pueden parecernos abultados, no se distancian mucho de las cifras de despidos que se han dado en el sector durante 2023. Sin embargo, estos despidos no se traducen a un aumento del miedo en los mercados: al contrario, los beneficios y las expectativas puestas en estas empresas son, en gran medida, lo que espolea las subidas en la bolsa de Wall Street.
La escritora y periodista Marta Peirano habla en su sección de tecnología sobre la demanda del periódico norteamericano The New York Times a OpenAI y Microsoft por haber utilizado sus artículos sin permiso bajo petición de los usuarios de ChatGPT. OpenAI ha respondido a esta reclamación y analizamos las posibles salidas que tiene a esta situación.
La batalla por el control de OpenAI, la empresa creadora de ChatGPT, ha dado este miércoles un nuevo vuelco. Su consejero delegado, Sam Altman, que fue despedido hace cinco días, regresa a su puesto y sale la junta que le echó. Es el triunfo de quienes apuestan por el crecimiento rápido de la inteligencia artificial frente a los partidarios de priorizar la seguridad.
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El viernes 17 de noviembre, la empresa de inteligencia artificial OpenAI, la creadora de ChatGPT, anunció el despido de Sam Altman como consejero delegado y miembro de la junta directiva alegando una pérdida de confianza de la junta directiva. Días después, Altman fichó por Microsoft mientras que casi toda la plantilla de OpenAI amenazaba con irse si no dimitía la nueva junta directiva de la compañía.
Manuel Moreno, director del medio de comunicación sobre internet, redes sociales y tecnología TreceBits, explica al Canal 24 horas que "es un auténtico culebrón" que se ha ido desarrollando durante los últimos cuatro días. ¿Por qué se ha producido esto? Moreno recuerda que hay dos corrientes en relación con la forma de pensar el futuro de la inteligencia artificial en el mundo: una a favor de comercializar productos de inteligencia artificial y desarrollarla, la corriente de Altman, y otra corriente que busca regular más la inteligencia artificial y se valoren los riesgos que puede tener su desarrollo, donde se sitúa el antiguo consejo de administración de OpenAI. "Por eso le despidieron, porque no estaban de acuerdo en que se comercializara de la manera en la que Altman quiere hacerlo", incide el experto.
No obstante, días después Altman ha vuelto a OpenAI y lo ha hecho como consejero delegado. "Vuelve con más poder todavía y liderando esa corriente de desarrollar comercialmente la inteligencia artificial", cuenta Moreno.
¿Y en qué consiste esta comercialización? Uno de sus objetivos es vender algunas funciones que ya hace la inteligencia artificial a empresas para conseguir datos de los usuarios. "También aplicarla a cualquier otro producto que se pueda comercializar y que esté desarrollado con inteligencia artificial", explica Moreno al Canal 24 horas. Asimismo, el experto dice que OpenAI y Altman buscan desarrollar no solo software, sino también hardware, es decir, procesadores y chips encaminados a potenciar la inteligencia artificial, algo por lo que también el consejo de la empresa le cesó al principio el viernes 17 de noviembre. "Ahora ya lo va a poder realizar con el apoyo del nuevo consejo de administración de la empresa y con el apoyo de Microsoft, que se convierte en el principal accionista de OpenAI, con más del 49% de sus acciones", señala.
En este contexto, el foco se pone de nuevo en las administraciones públicas y su papel para regular esta tecnología y su riesgo. "No es necesario frenar el desarrollo en sí, pero sí un marco regulatorio que permita que ese desarrollo se realice en beneficio de todos", matiza Moreno. Como dice, las instituciones europeas están llevando a cabo informes preliminares para llevar a cabo ese marco, pero lo están haciendo a un ritmo "demasiado lento", incide, si se compara con la velocidad a la que evoluciona la inteligencia artificial.
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Revolución en el mundo de la inteligencia artificial. El gurú más conocido de esta nueva tecnología, Sam Altman, seguirá desarrollándola en Microsoft, después de que la empresa que fundó, OpenAI, le haya destituido. Las razones que se barajan van desde una crisis de confianza a discrepancias en la estrategia económica del proyecto sin ánimo de lucro.
Zaragoza será la sede de un nuevo campus de centros de datos de Microsoft. Cuando esté terminado en 2030, dará servicios en la nube a empresas y entidades públicas europeas. Con el impulso de esta infraestructura, la economía española podría sumar más de 8.000 millones de euros, según el gigante tecnológico.
