En Francia el Gobierno ha tenido que poner protección policial a una adolescente que está recibiendo amenazas de muerte por decir en redes sociales: "odio la religión, el Corán y toda religión de odio. El Islam es una mierda."
Mila, que tiene 16 años, ha tenido incluso que abandonar su colegio porque se hizo pública su dirección.
El ministerio del Interior francés estudia crear una célula para combatir y prevenir los crímenes de odio en las redes sociales.
El caso despierta la polémica por el derecho a la blasfemia y divide a los franceses.