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Pamplona cxelebra el día más importante de sus fiestas, con la procesión al santo como eje central, después de que a primera hora de la mañana se haya corrido el primer encierro de este año con tres heridos por asta de toro de los Cebada Gago.

Los cinco acusados de haber violado a una mujer en los pasados sanfermines llevan un año en prisión provisional. Según ellos, la relación fue consentida, pero la víctima asegura que fue introducida a la fuerta en un portal y obligada a mantener relaciones sexuales. Los detenidos tenían un grupo de WhatsApp donde se hacían llamar "la manada". Según el auto, a través de él intercambiaron grabaciones y fotografias que hicieron con sus móviles durante el acto. Esta prueba será clave para que el juez determine su culpabilidad. Todavía no hay fecha para el juicio. La fiscalía pide para ellos 22 años y 10 meses de prisión.

La entrada de los toros en la ciudad de Pamplona se encuentra consignada en una crónica de 1686, aunque no fue hasta el siglo XIX cuando el Ayuntamiento de la ciudad autorizó legalmente a correr delante de los toros. Hemingway, que reflejó la tradición en su libro 'Fiesta', ayudó a internacionalizarla.

Dos voluntarias de la Asociación de Ayuda en carretera de Navarra han sido las encargadas de lanzar el chupinazo con el que comienza San Fermín. Miles de personas abarrotaban la plaza del Ayuntamiento. Nueve días de fiesta con más de 400 actos oficiales, en los que los encierros vuelven a ser uno de los principales atractivos.

La fiesta de San Fermín ha empezado sin grandes sobresaltos con el cohete festivo prendido por la Asociación DYA y representado en dos de sus voluintarias: Paula Remírez y María Calado.

Miles de personas han llenado la plaza del Ayuntamiento de Pamplona para recibir los Sanfermines con el tradicional chupinazo. Dos voluntarias de la asociación de voluntarios DYA, implicada en el dispositivo sanitario de los encierros, han sido la encargadas de lanzar el cohete desde el balcón consistorial en el que finalmente ha ondeado la ikurriña junto a las banderas oficiales de España, Navarra, Pamplona y la Unión Europea, pese a la advertencia del Gobierno de que no sería legal.