Suscríbete a este tema
- Bermejo ha tenido que hacer frente a una huelga de funcionarios y a la primera de jueces
- Ha acusado a los jueces de coorporativismo y al nuevo CGPJ de falta de pluralidad
- Ha recibido críticas por la reforma de su vivienda por 250.000 euros y la cacería con Garzón
- Deja en tramitación la reforma del Código Penal y la reforma de la legislación procesal
- Las asociaciones están dispuestas a colaborar y a reanudar negociaciones
- El CGPJ ve abierta una puerta a la esperanza para afrontar los problemas
- Los secretarios judiciales valoran positivamente el nombramiento
Ya se conoce el nombre del sustituto de Mariano Fernández Bermejo al frente del ministerio de justicia. Se trata de Francisco Caamaño y ya hay fecha para que tome posesión del cargo.
Los socialistas y el gobierno piden respeto y dicen al PP que tome ejemplo.
De las cuatro que existen, dos se pusieron, incluso, al frente de la huelga de jueces del pasado 18 de febrero.
- Caamaño jurará como Ministro de Justicia tras la dimisión de Fernández Bermejo
- El nuevo titular de justicia afirma que "dará continuidad" a proyectos de Bermejo
- Caamaño ha calificado a Bermejo de "gran ministro"
- Era hasta ahora Secretario de Estado de Relaciones con las Cortes
El ministro de Justicia, Mariano Fernéndez Bermejo, ha presentado su dimisión este lunes por la "utilización" que se está haciendo de su encuentro en una cacería con el juez Garzón, tal y como él mismo ha anunciado en una conferencia de prensa urgente, que ha levantado una gran expectación. Según ha podido saber RTVE.es su sustituto será Francisco Caamaño Domínguez, que actualmente ocupa el cargo de secretario de Estado de Asuntos Constitucionales y Parlamentarios.
El lider del PP considera adecuada la marcha de Bermejo. Se trata de una dimisión obligada (23/02/09).
El PP celebró la dimisión del ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, porque a su juicio con ella asume su responsabilidad por su participación en la cacería junto al juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón y así se pone fin a una "etapa nefasta" de este departamento.
Entrevista exclusiva en Radio Nacional con Francisco Caamaño, hasta ahora secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, y que será el nuevo ministro de Justicia (23/02/09).
Mariano Fernández Bermejo sustituyó a López Aguilar al frente del Ministerio de Justicia en febrero de 2007. Estos dos años han estado salpicados de polémicas. La última, la cacería con el juez Baltasar Garzón, el mismo fin de semana en el que instruía un sumario sobre una trama de corrupción supuestamente vinculada a cargos del Partido Popular (23/02/09)
- Fue el principal "negociador" en la reforma del Estatuto de Cataluña
- Hasta ahora era secretrario de Estado con las Cortes y de Asuntos Constitucionales
- Su trayectoria profesional ha estado vinculada al Derecho Constitucional
- Fernández Bermejo sustituyó a López Aguilar en febrero de 2007 al frente de Justicia
- Su nombramiento no gustó al Partido Popular que el tachó de "ultraizquierdista"
- Antes, fue fiscal jefe de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo
- La polémica por la cacería con el juez Baltasar Garzón ha acabado con su dimisión
- Las primeras dimisiones se produjeron en los Gobiernos de Suárez
- Con Felipe González hubo siete dimisiones por escándalos
- Con Aznar dimitió Manuel Pimentel por otro escándalo en su ministerio
- También ha habido dimisiones por motivos de salud o personales
- Dice que "no puede tolerar la utilización que se está haciendo de la cacería"
- Francisco Caamaño Domínguez será su sustituto
- "Lo mejor que podía hacer por el proyecto socialista es dejar mi puesto a otro", ha dicho
- Varios miembros del PSOE han criticado la cacería del ministro con el juez
- El PP ha pedido en reiteradas ocasiones su dimisión
- Otro frente abierto de Bermejo es el conflicto con los jueces
- Esta convocatoria de prensa no estaba prevista en el día de hoy
El primer ministro designado y dirigente del Likud, Benjamin Netanyahu, ha ofrecido a la líder del partido Kadima, Tzipi Livni, unirse a un gobierno conjunto, durante una reunión que los dos han celebrado, durante tres horas, en un hotel de Jerusalén.
