Estados Unidos espió, al menos desde 2006 hasta mayo de 2012, a los tres presidentes franceses que se sucedieron en ese periodo, Jacques Chirac, Nicolas Sarkozy y François Hollande, según los documentos de Wikileaks publicados por Libération y Médiapart.
La Agencia Nacional de Seguridad estadounidense (NSA por sus siglas en inglés) espió a los tres jefes de Estado franceses y a colaboradores próximos como diplomáticos o jefes de gabinete y había reunido los documentos obtenidos de esas escuchas bajo el epígrafe "Espionaje Elíseo".