El balance de víctimas mortales por los grandes incendios que están arrasando el sureste de Australia ya supera las 180 y otras 50 personas continúan desaparecidas mientras los bomberos luchan por controlar los 25 fuegos que continúan activos en el estado de Victoria, el más afectado por las llamas.
Australia sufre la más devastadora ola de incendios de su historia.(09/02/09)
Más de un centenar de personas han perdido la vida en los incendios que sufre el sur de Australia. (08/02/2009)
Crece el número de muertos en Australia por los incendios que azotan el sur del país y que son los más trágicos de su historia: ya son 84, pero se teme que aumenten. Las llamas avanzan hacia Melbourne, una de las ciudades más importantes.
Los equipos de rescate han encontrado ya 84 cadáveres, víctimas de un incendio que también ha destruido al menos 640 viviendas y miles de hectáreas en el estado de Victoria, al sur del país. Es la peor ola de incendios del último cuarto de siglo.
En el estado sureño de Victoria el fuego ha provocado la muerte de al menos 14 personas. (07/02/09)
Un avión de pequeño tamaño ha tenido que realizar un aterrizaje de emergencia en el mar, frente a la costa de la ciudad de Darwin, sin que ninguno de sus ocupantes haya resultado herido (06/02/09).
Australia continúa sufriendo fuertes inundaciones en varias localidades. A pesar de todo, algunos ciudadanos han sabido sacarle el lado positivo a la situación.
Tras pasar una fuerte ola de calor, Australia se ha enfrentado en los últimos días al ciclón Ellie, que ha dejado importantes inundaciones en la localidad de Ingham, donde cientos de vecinos han tenido que abandonar sus casas.
En Australia se celebra un evento muy particular: carreras de cucarachas.
Más de 500 bomberos trabajan en Australia para controlar los incendios que afectan sobre todo al estado de Victoria. El fuego es consecuencia de las altas temperaturas que se están registrando en el sureste del país.
Dos presos de una cárcel de Nueva Zelanda frustran su propia huída al tropezar con una farola. Los reclusos estaban unidos por unas esposas y no fueron capaces de esquivar el obstáculo.
Al menos 48 cachalotes han muerto en la costa de Tasmania (Australia), tras quedar varados cerca de la desembocadura de un río. Las pequeñas ballenas fueron avistados la pasada noche, pero su difícil localización impidió el rescate inmediato.
