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El papa Francisco, que hasta su elección el pasado 13 de marzo era arzobispo de Buenos Aires, recibe este lunes a la presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, en la primera audiencia a un jefe de Estado.

El Vaticano ha considerado el encuentro como un "gesto de cortesía y afecto" hacia la Jefa de Estado y al pueblo argentino.

"Se trata de un gesto de cortesía, de atención hacia Argentina y su presidenta", ha explicado a Efe el portavoz vaticano, Federico Lombardi, que ha precisado que es "natural" que si viene la presidenta de Argentina, el país del papa, la reciba de manera "diferente" al resto las delegaciones que asistirán a la misa de inicio de pontificado, el 19 de marzo.

El portavoz ha subrayado que no se trata de una visita formal o de Estado, sino un gesto de cortesía.

La reunión se produce después de que la relación entre el entonces arzobispo de Buenos Aires y los Kirchner haya sido bastante tensa en los últimos años, sobre todo tras la aprobación de las leyes sobre el aborto y el matrimonio homosexual.

Antes del rezo del ángelus, el papa Francisco llegaba a la parroquia de Santa Ana en el Vaticano para oficiar la misa dominical. Dentro les ha dicho a los fieles que Jesús no ha venido al mundo por los justos sino por los pecadores y a la salida, saludos personales, uno por uno. Muchos de estos fieles tenían otra cita. A las doce en la Plaza de San Pedro Esos muchos se han convertido en 300.000 personas según el Ayuntamiento de Roma. Hoy han trabajado, y mucho, los servicios de seguridad y sanitarios atención a desmayos y subidas de tensión. Muchos peregrinos también que han escuchado el mensaje de Francisco.

Decenas de miles de personas han acogido al papa Francisco con un interminable aplauso cuando ha salido a la ventana en la plaza de san Pedro para el rezo del ángelus, el primero de su pontificado.

Decenas de miles de personas han acogido al papa Francisco con un interminable aplauso cuando ha salido a la ventana en la plaza de san Pedro para el rezo del ángelus, el primero de su pontificado. Francisco ha hecho hincapié en la misericordia de Dios, ha destacado su paciencia y ha dicho que el señor "no se cansa de perdonar nunca. El problema - ha continuado-, es que nosotros nos cansamos de pedir perdón". "No nos cansemos nunca de pedir perdón". "Un poco de misericordia cambia el mundo, lo hace menos frío y más justo", ha añadido.

La Iglesia católica ya tiene Papa en la figura de Jorge Mario Bergoglio, jesuita argentino de 76 años, quien ejercerá su papado con el nombre de Francisco. Tras la renuncia de Benedicto XVI el mundo católico esperaba con interés el nombre del nuevo pastor de su iglesia. La elección de Bergoglio en quinta votación ha supuesto toda una sorpresa porque no aparecía en los pronósticos para ocupar el sillón de Pedro. Bergoglio es el primer Papa jesuita de la historia de la Iglesia y también el primer latinoamericano. Quienes conocen a Bergoglio dicen que se trata de una persona "sencilla y humilde; que conecta con la realidad de la gente". Abierto, cercano y comprometido con la evangelización, su elección augura un giro en la Iglesia. Informe Semanal ha seguido en Ciudad del Vaticano el proceso de elección del nuevo Papa así como los retos que se le plantearán en su papado. Cuando aún era cardenal de Buenos Aires, Bergoglio afirmó en una entrevista concedida al diario italiano "La Stampa" que apostaba por una "Iglesia que saliera de los palacios, que dejase de mirarse el ombligo y que se lance a las calles."

El informe de las filtraciones sobre el Vaticano, un relato de pasiones humanas, intrigas entre cardenales y zancadillas para impedir la "limpieza" de la banca vaticana, a la que investiga la justicia italiana por no cumplir las normas contra el blanqueo de capitales, ha convencido a la Iglesia de la necesidad de renovar la curia

El papa Francisco ha mantenido un encuentro con los medios de comunicación que han cubierto el Cónclave. Asegura que eligió su nombre como homenaje a San Francisco de Asís.

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En el segundo día de pontificado, el papa Francisco ha recibido en la Sala Clementina del Vaticano a todos los cardenales, a los 115 electores y a los octogenarios que no pudieron asistir al cónclave. El papa les ha pedido que no caigan en el pesimismo.

El nuevo papa, Francisco, ha tenido este viernes un encuentro con los cardenales, dentro de su agenda de actos para sus primeros días de reinado.

Jorge Mario Bergoglio ha agradecido a todos los cardenales su colaboración durante el cónclave y les ha instado a no caer en el "pesimismo".

"No tenemos que ceder al pesimismo y al desaliento (...) el Espíritu Santo dará a la Iglesia el valor de perseverar y buscar nuevos métodos de evangelización", ha declarado.

El encuentro ha terminado con una anécdota. Al terminar su discurso y levantarse del sillón, Bergoglio ha trastabillado y casi cae, aunque ha podido mantenerse en pie.

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