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Los buzos y los equipos de rescate continúan las labores de búsqueda de víctimas en la Albufera y la desembocadura del barranco del Poyo. La zona afectada tras el paso de la DANA es inmensa, por lo que decenas de voluntarios se han sumado también a las labores entre el barro, el lodo y la maleza. Según los últimos datos ofrecidos por el Gobierno, el número de personas desaparecidas asciende a un total de 78 y el de víctimas mortales a 223.

Hay miles de personas peinando las zonas afectadas por la DANA en busca de las personas desaparecidas. Para ayudar en esta labor, existen herramientas como, por ejemplo, las imágenes por satélite. De hecho, la compañía ICEYE fue la primera en dar datos de la destrucción en Valencia: calculan que más de 534 kilómetros cuadrados han sido arrasados. Gonzalo García Muñoz, director general de ICEYE España y vicepresidente global de Operaciones en ICEYE, ha estado en 24 horas de RNE para explicar cómo funcionan esos mapeos que pueden ayudar también en la búsqueda de desaparecidos: "Las herramientas que tenemos pueden ayudar a entender la magnitud del impacto en cuestión de infraestructuras. Esto se correlaciona de manera directa con dónde pueden estar los desaparecidos". Por ello, Gonzalo García Muñoz informa que han priorizado los primeros análisis en edificios e infraestructuras porque son áreas donde "puede hacer más falta el uso de esta data". Según los datos de ICEYE, al menos 4.600 edificios se han visto impactados, el 80% en Valencia.

Susana Vidal, una vecina afectada del municipio valenciano de Pedralba, sigue buscando a su marido e hija, José Javier Vicent y Susana Vicent. Esta mujer no sabe nada de ellos desde el martes cuando su marido le envió un WhatsApp diciendo que "pasa mucha agua por delante de la casa". Es una casa de campo en una zona rural a tres kilómetros del pueblo de Pedralba.

También ha expuesto que su zona es muy complicada de acceder porque "todos los campos se han convertido en barro", por lo que ha pedido que les "hace falta maquinaria pesada. Algo que pudiera entrar ahí para levantar, para remover, para buscar por debajo de lo que está a la vista. Porque hay que contar con todas las posibilidades". "No os olvidéis de nosotros, por favor", ha rogado Susana.

"Sabemos que los están buscando", explica Bárbara, la tía de los niños desaparecidos hace ocho días en la localidad valenciana de Torrente tras el paso de la DANA. Rubén, de cinco años, e Izan, de tres, desaparecieron en su casa cuando reventó la pared de la habitación en la que se encontraban con su padre a las 18:00. "El papá cuenta que el agua llevaba muchísima fuerza", dice la tía de los pequeños en TVE.

Una semana después de la DANA, los servicios de rescate siguen buscando a los desaparecidos. Izán y Rubén estaban en casa con su padre cuando la riada les sacó literalmente de la vivienda. Su padre consiguió salvarse agarrándose a un árbol, pero Izán y Rubén no corrieron la misma suerte. Sin una cifra oficial, decenas de menores continúan aún en paradero desconocido. Mientras, miembros del Ejército, de los Bomberos, la Policía Nacional y la Guardia Civil han desplegado un gran operativo para encontrarlos. También piden a los familiares que aún no han denunciado las desapariciones que acudan a los puntos habilitados y faciliten el máximo de información, así como muestras de ADN.

Siete días después de la tragedia los esfuerzos aquí en Valencia se centran en la limpieza y reconstrucción pero, sobre todo, en localizar a los desaparecidos. Una de las zonas en las que se busca es la de Albufera porque la riada ha podido arrastrar hacia allí a algunas personas. Las autoridades buscan en el agua y también con drones. La Guardia civil hace un llamamiento a los familiares de los desaparecidos para que aporten muestras de ADN. En total, ya se han realizado mas de 1300 rescate.

"Vienes, ves las fotos, y cada vez es más real que no lo vamos a encontrar, y es muy duro que no podamos enterrarlo". Así hablaba esta familia que buscando a su abuelo. Teme que nunca lo encuentren. Vivía solo en un apartamento de una residencia de Picanya. Creen que salió y que ya no pudo volver, porque encontraron la puerta cerrada con llave. La suya puede ser la de muchas personas que buscan desesperadas a sus seres queridos, en una búsqueda que ha entrado en una nueva fase para buscar los cauces subterráneos. Hace tan solo unas horas, la Guardia Civil encontraba una de las últimas víctimas en el Barranco de Pelos, en Chiva. Los agentes creen que muchos cuerpos han podido acabar en el mar o en la Albufera, y ha sido allí donde han centrado allí buena parte de los esfuerzos. Lo mismo ha pasado en el parking del cetro comercial Bonaire, donde los drones han servido de guía para explorar su interior y saber a qué se enfrentaban. Según Policía, por el momento no se han encontrado fallecidos.

La DANA más devastadora de las últimas décadas en España ha dejado al menos 214 muertos y decenas de desaparecidos. La peor parte se la ha llevado la Comunidad Valenciana. Rosa sigue buscando a su hermana, Elvira Martínez, tiene 64 años, y a su sobrina Elisabet Gil, tiene 38 años. La última vez que tuvieron contacto con ellas fue el martes por la tarde. Iban en un vehículo Ford negro y se dirigían al hotel Carreta a trabajar.

Seis días después de la DANA más devastadora de las últimas décadas en España ha dejado, por el momento 214 muertos, y decenas de desaparecidos. Alicia busca a su marido, Fernando Durán, de quien no sabe nada desde el martes cuando salió él de trabajar. Fernando le dijo que estaba en casa de un chico y que estaba a salvo. Es el último mensaje que recibió Alicia de él.

Hasta 200 efectivos buscan a los cinco vecinos que están desaparecidos en Letur, Albacete, son un matrimonio, dos trabajadores municipales y una mujer. Además, para estas labores se han incorporado tres unidades perros especializados en localizar cuerpos humanos.

En Landete, en la provincia de Cuenca, la fuerte lluvia se llevó por delante el puente y siguen trabajando para restablecer la comunicación entre las dos zonas del pueblo, que además ha sufrido daños en infraestructuras como el depósito de agua. En Mira, también en Cuenca, donde se encontró la segunda mujer fallecida, tienen el 70% de superficie dañada.