Kim Kardashian ha roto su silencio tres días después del polémico acto de campaña electoral que protagonizó su marido, Kanye West. Tal y como habían publicado varios medios estadounidenses, la familia Kardashian estaba muy preocupada por el estado de Kanye y por algunas de las cosas que dijo en su mitin, como que "casi mata" a su hija mayor, North West, porque quiso que Kim abortara en en las primeras semanas de embarazo.
A través de Instagram stories, la empresaria y celebrity ha hecho una sincera y durísima confesión sobre lo que significa convivir con alguien que padece una enfermedad mental. Es la primera vez que Kim Kardashian West habla sobre la enfermedad mental de su marido. Y en sus palabras invita a reflexionar a medios y ciudadanos sobre la necesidad de ayudar y comprender a las personas enfermas y a sus familias para superar estos momentos porque, como remarca en su propio caso, su marido "es una persona brillante" y su enfermedad "no anula sus sueños o ideas creativas. Es parte de su genialidad y ha logrado hacer realidad muchos de sus grandes sueños".