"El mundo de Peppa Pig es mi lugar ideal", con esa frase salió el primer ministro británico, Boris Johnson, de un atolladero durante un discurso. El lapsus que tuvo el líder y que trató de salvar hablando del dibujo animado ha servido a la prensa británica para ahondar en la crisis abierta en su propio partido. El último ejemplo: una veintena de diputados 'tories' han votado en contra de su plan para recortar las ayudas sociales a los ancianos. La última propuesta del gobierno del primer ministro británico, Boris Johnson, ha salido adelante con una ventaja de tan solo 26 votos.
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