El Madrid gana al Elche con un doblete de Vinicius
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El portero del Rayo Vallecano, Stole Dimitrievski, ha asegurado en Estudio Estadio que el campo de Vallecas "es increíble". "La grada y la afición me encanta, siempre está apoyando. En Vallecas siempre apoyan y ayudan al equipo", explicó el cancerbero macedonio. "Estoy muy feliz en España, he encontrado mi segundo país, espero seguir otros diez años", apuntó el jugador, que no comenzó como titular, pero una lesión de Luca Zidane en el primer partido de Liga le abrió las puertas a la portería del Rayo.
La jornada 11 de LaLiga entra en su segundo acto con la disputa de los partidos de la mayoría de favoritos, a la espera de lo que hagan el jueves Real Sociedad, líder, y Atlético de Madrid. Este miércoles, turno para un Real Madrid armado de moral, todo lo contrario que el FC Barcelona a la vuelta del Clásico, y un Sevilla en racha.
Comienza precisamente el Barça, que tras caer ante el Madrid el pasado domingo visita el campo del Rayo Vallecano, uno de los modestos que están sorprendiendo por su trayectoria siendo recién ascendido.
Alejandro Catena, jugador del Rayo Vallecano, analiza el próximo partido de Liga de su equipo, el miércoles en casa ante el FC Barcelona. "El Barça siempre es el Barça", dice Catena en una entrevista con TVE. "Tenemos opciones, pero el partido no va a ser fácil". Catena cree que las claves del buen rendimiento de su equipo están siendo "el compromiso y el trabajo", y además valora el apoyo de la afición: "La gente está respondiendo, está asistiendo el campo, y nosotros lo notamos. Para nosotros es muy importante y creo que el miércoles nos va a sumar mucho".
Las caras y las palabras de los aficionados culés después del Clásico del Camp Nou, que terminó con victoria del Madrid sobre el Barça (1-2), eran fiel reflejo de la decepción entre la parroquia azulgrana.
Ronald Koeman, sin cordón de seguridad, tuvo que pasar con su vehículo entre decenas de aficionados que le esperaban, a la salida del Camp Nou y ya fuera de las instalaciones blaugranas. Cuando el técnico neerlandés aminoró la marcha para no atropellarlos, estos se lanzaron a golpear el coche entre insultos y algún grito de 'fuera, fuera'.