- Mauritania acoge a más de 100.000 malienses en un campo de ACNUR
- Los refugiados huyen de la violencia y la inestabilidad política de su país
Xavier Lovelle, jefe de base de Save the Children en Kaédi, capital de la región mauritana de Gorgol, nos cuenta los programas de ayuda que la ONG para la que trabaja lleva a cabo en el país del Sahel. "Nuestro trabajo de emergencia tiene dos componentes fundamentalmente: intentar restablecer los mecanismos de recursos de las familias que están sufriendo la crisis y el seguimiento nutricional de los niños menores de cinco años", explica (24/08/12).
La responsable del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Mauritani, Noelia Díaz, nos cuenta que toda la zona del Sahel está afectada por la sequía y que en el caso de Malí la población cruza todos los días la frontera buscando refugio en Mauritania. Ahora mismo hay 103.000 refugiados en un campo que gestiona ACNUR en colaboración con el gobierno. En él hay sobre todo mujeres y niños. Los recursos de Mauritania son limitados, así que fue muy importante que la comunidad Internacional lo apoyara. "Observamos con atención lo que ocurre en Malí, pero solo sabemos que la gente sigue huyendo de ese país. En Mauritania trabajamos con las autoridades y ACNUR se encarga de garantizar la seguridad tanto del personal humanitario como de los refugiados", explica Noelia Díaz. El campo está a unos 60 kilómetros de la frontera precisamente por este motivo. De momento no ha habido incidentes. "Estamos operando en condiciones climáticas severas y con dificultades para transitar por carretera. Las pistas de aterrizaje, además, gran parte del tiempo no se pueden utilizar", añade Noelia (24/08/12).
- Las ONGs preparan a la población para encarar las crisis sin ayuda externa
- La emergencia alimentaria impide que se refuercen este tipo de programas
La directora de Cooperación de UNICEF, Carmen Molina, asegura que la situación en el Sahel es muy grave, porque, entre otras cosas, cuatro millones de niños están peligro. "En total, 18 millones de personas están en riesgo inminente", asegura la cooperante, que añade que a la falta de agua y alimentos hay que sumar los conflictos armados que se viven en los ocho países de la franja sur del Sáhara. Esto, explica, dificulta tanto el reparto de ayuda como el acceso de los medios de comunicación, por lo que es difícil saber exactamente qué está pasando. "Lo mas urgente es llevar agua y alimentos a esta población así como medicamentos, ya que en muchos países se están dando casos de cólera y sarampión además de que la desnutrición hay que tratarla con fármacos", afirma. Subraya que a pesar de la crisis hay que seguir ayudando, tanto los gobiernos como las empresas y los ciudadanos, y subraya que en el norte de Mali hay casi 400.000 desplazados, lo que complica mucho el trabajo humanitario. Por último, nos cuenta que su objetivo principal es colaborar en todos los prograrmas con los diferentes gobiernos para que un día puedan abandonar estos países y sean sus propios responsables los que a través de la infraestructura creada puedan atender a sus ciudadanos (23/08/12).
Lara Contreras, responsable de Acción Humanitaria en África del Oeste de Intermón Oxfam, pide a la comunidad internacional que se invierta más en programas de resiliencia en el Sahel, es decir, que se ayude a que las comunidades sean capaces de enfrentarse a las crisis sin tener que depender de la ayuda externa. "Estamos pidiendo que no solo se responda a la situación humanitaria con fondos que son muy necesarios, sino que se adopte desde el día de hoy el largo plazo, que se invierta en programas de resiliencia que rompan el ciclo del hambre en un futuro", explica (23/08/12).
La representante de Medicos Mundi en Burkina Faso, Teresa López Cotarelo, afirma que hasta octubre y noviembre no se podrán recoger las cosechas en ese país del Sahel y que como las del año anterior ya se han terminado hay mucha gente que no tiene ya nada que comer. Como siempre los niños son la máxima preocupación, porque tal como nos comenta esta cooperante, muchos de ellos no tienen ganas de comer lo que las ONGs les facilitan y, por lo tanto, el tratamiento médico se hace muy difícil. Por último, Teresa denuncia que hasta que no estallan las crisis alimentarias la comunidad internacional no reacciona (22/08/12).
- Los grupos terroristas impiden que llegue la ayuda humanitaria a la zona
- Las ONGs esperan que cambie la situación con el nuevo gobierno de transición
Emilio Hernando, misionero salesiano en Bamako, la capital de Malí, denuncia que el norte del país está "vedado" a las organizaciones internacionales, que no pueden hacer llegar la ayuda humanitaria a la población ante las amenazas de los numerosos grupos terroristas de la zona. El agravamiento de la crisis alimentaria en este país del Sahel ha provocado que 175.000 niños estén ahora en riesgo de desnutrición aguda, según datos de UNICEF (22/08/12).
Emilio Hernando, director del centro salesiano Pere Michel de Bamako, en Mali, dice que la situación en el país parece que puede comenzar a arreglarse un poco tras la elección de un nuevo gobierno de unión nacional con 31 ministros. "Esperamos que este nuevo ejecutivo se tome en serio la transición y trabajen juntos para luchar contra el norte. Hay mucha esperanza en este gobierno que tiene que ser apoyado por la comunidad internacional", afirma el cooperante, que añade: "Es necesario parar a los grupos islámistas y extremistas del norte que han provocado la huída de miles de personas bien hacia los países de alrededor o hacía el centro del país. Se trata de grupos que se respetan mutuamente y que se dedican unos al contrabando de armas, otros al de drogas y otros que secuestran a extranjeros para obtener dinero". De momento los funcionarios han recibido su salario, con lo que la situación ha mejorado un poco, pero si el próximo mes no se les paga, advierte Emilio Hernando, la situación va a ser catastrófica. "El problema de Mali es ya internacional, porque puede desbordar y extenderse a Níger y Argelia (22/08/12).
Nos interesamos por la situación en la que se encuentra Mali y para ello hablamos con Giovanni Lepri, responsable regional de proyectos de ACNUR, que nos cuenta que 200.000 personas han cruzado la frontera y otras 200.000 se han desplazado al interior huyendo de la violencia de los grupos terroristas (21/08/12).
- Los problemas sanitarios agravan la crisis alimentaria del país
- 900.000 niños podrían morir de hambre según datos de UNICEF
La representante en Andalucía de Médicos Mundi, Teresa López, nos habla de la situación de Burkina Faso, país al que lleva ayudando 25 años. Nos cuenta que dadas las circunstancias allí, su ONG, que suele llevar a cabo proyectos de salud infantil a largo plazo, ha decido dar prioridad a trabajos de respuesta urgente a la crisis alimentaria y de asistencia inmediata a niños malnutridos (21/08/12).
El director técnico de la oficina de Medicus Mundi en Andalucía, Damiano Sartori, subraya que la situación de cada país del Sahel es diferente. "Hay muchos problemas de inseguridad en el norte de Malí, mientras que en Burkina Faso es más fácil llegar a cualquier sitio", explica. Además, Damiano plantea el problema de hacer llegar dinero a la gente, en su opinión la mejor forma de ayudarles, ya que así, dice, pueden comprar en los mercados locales y hacer fluir el dinero. En cuanto al hambre, señala que todo depende de la temporada de lluvias que acaba en septiembre. Si es buena, la gente podrá comer; en caso contrario, habrá que hacer lo que sea necesario por ayudar (21/08/12).
La directora ejecutiva de UNICEF, Paloma Escudero, nos cuenta que en el Sahel hay más de cuatro millones de niños menores de cinco años en riesgo de desnutrición aguda y más de 300.000 con desnutrición aguda muy grave. Si la situación de sequía empeora, añade, y si se complica la situación con brotes de cólera o problemas de seguridad, serán muchas más las familias que no tengan nada de comer en los próximos meses (20/08/12).
- Optimismo y prudencia en el país del Sahel ante el regreso de las lluvias
- 400.000 niños nigerinos padecen desnutrición severa
Conversamos con un misionero de la Sociedad de Misiones Africanas que colabora con Manos Unidas en Tera, en Níger. Su nombre es Rafael Marco, lleva 42 años trabajando en África y ha formado una comunidad cristiana que distribuye 100 kilos de cereales para grupos de siete personas (20/08/12).
La secretaria técnica del departamento de proyectos de Manos Unidas, Adela González, nos habla de la alerta alimenticia del Sahel, muy preocupante en Mauritania, Mali, Níger, Senegal, Gambia, Chad y Burkina Fasso. "Estamos hablando de una situación límite que puede afectar a entre 8 y 13 millones de personas que van a pasar mucha hambre y algunas van a morir", nos explica esta cooperante, que asegura que la causa principal de la crisis es la carencia de agua y la falta de medios de producción: solo se riega el 3,8% de la tierra y no se tienen semillas ni abono. "Tanto los gobiernos como las ONGs tratamos de hacer un trabajo de prevención a medio plazo con los agricultores para que dispongan de agua y semillas. Se está especulando con el hambre", denuncia. Ante una emergencia como esta, añade Adela González, nos debemos movilizar todos apoyando a estas poblaciones con un kit de alimentos básico y agua, pero hay que seguir trabajando, continúa, para evitar que la situación se agrave. "Con 60.000 euros se va a alimentar a 3.000 personas, a 200 campesinos se les va a formar y 100 ganaderos aumentarán su ganado" (20/08/12).
La cantante estadounidense Beyoncé puso el domingo punto final a la celebración del Día Mundial de la Ayuda Humanitaria con un vídeo grabado en la ONU. El tema "I was here" (Yo estuve aquí), forma parte de una campaña lanzada el 2 de agosto en Internet (www.whd-iwashere.org) para sensibilizar del trabajo de las organizaciones humanitarias en el mundo. La ONU se ha felicitado de haber recibido ya más de un millón de mensajes.
Las ONG han advertido, con motivo de la conmemoración del Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, de que cada vez hay más situaciones de crisis humanitaria a las que tienen que hacer frente con menos recursos y con la amenaza de ser víctimas de ataques o secuestros por parte de grupos terroristas.
En declaraciones a Efe, representantes de Cruz Roja, Médicos Sin Fronteras (MSF) e Intermón Oxfam han hecho una radiografía de la asistencia humanitaria que prestan en la actualidad en las zonas más necesitadas y han ensalzado la figura de los cooperantes que cada día colaboran para evitar millones de muertes en el mundo.
En 2008, la Asamblea General de la ONU designó el 19 de agosto como el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria para aumentar la conciencia pública de esta ayuda en todo el mundo, reconocer a las personas que arriesgan sus vidas para ayudar a los necesitados y conmemorar cuando 22 personas perdieron la vida en 2003, tras un ataque en las oficinas de la ONU en Bagdad, Irak.