Un mar de fondos no muy profundos con decenas de ríos de gran caudal desembocando en el y amplias zonas de delta muy ricas en vegetación, es la descripción de lo que era buena parte de la provincia de Teruel hace 150 millones de años, la época en la que vivió el Turiasaurus riodevensis, el dinosaurio más grande de Europa y todos sus coetáneos.
Una tierra que crío auténticos gigantes que ya pueden verse en el último de los centros satélites que ha abierto el parque paleontológico Dinópolis en Riodeva, la población más rica de Teruel en yacimientos paleontológicos.