“Yo es que no tenía que haber venido", dice el actor Manuel Alexandre. Está a punto de cumplir 90 años y es parte de la historia viva del teatro, del cine y de la televisión de este país. Llega acatarrado y con una bufanda que le tapa hasta los ojos. En la sala de espera hace frío, no podemos pasar al estudio porque están iluminando, y menos mal que por fin aparece el camarero con el café prometido.

A Manuel Alexandre, a su colega Pedro Osinaga y al realizador Gustavo Pérez Puig los hemos citado en Prado del Rey para una entrevista que quiere ser un homenaje al Estudio 1 y en especial a ese monumento del teatro televisivo que es “Doce hombres sin piedad”.

Pedro Osinaga viene en mangas de camisa. Tiene un sentido muy "zen" del tiempo, sobre todo del tiempo de espera, quiero decir, que se lo toma con calma. Se sienta junto a nosotros y nos habla con su voz pausada y algo nasal.

-Yo es que no tenía que haber venido-, repite Alexandre, y en el brillo de sus ojos adivino una chispa de ironía.

Alexandre, Osinaga, José Bódalo, José María Rodero, Luis Prendes, Jesús Puente, Antonio Casal, Carlos Lemos, Ismael Merlo, Sancho Gracia, Rafael Alonso y Fernando Delgado forman el inolvidable reparto de "12 hombres sin piedad" que realizó, en estado de gracia, Gustavo Pérez Puig en 1973.

Gustavo Pérez Puig tiene 76 años pero está como un niño. Con su traje de color marrón y su aspecto algo desgarbado podría pasar por uno más de esos 12 hombres. Tiene una vitalidad contagiosa, lleva entre manos 20 asuntos, y con su charla, sus anécdotas y su memoria de elefante consigue sacarnos a todos del letargo.

Pérez Puig lleva en la tele desde el día de la inauguración. Puso en marcha los musicales, se inventó el play-back, que ya habían inventado por ahí fuera, pero hay que recordar que entonces España permanecía aislada del resto del mundo, y fue uno de los pioneros del teatro en televisión, junto con Guerrero Zamora, González Vergel o Pedro Amalio López.

Como realizador de dramáticos vivió la edad de oro de Televisión Española, una década prodigiosa (1965 - 1975) en la que se rodaron cientos de obras de teatro. Teatro clásico, contemporáneo, comedia, drama, sainete... de ese magma escénico emergieron un puñado de incuestionables obras maestras como el “Calígula” de Albert Camus realizado por Jaime Azpilicueta; “Panorama desde el puente” de Arthur Miller realizado por Alberto González Vergel; “Ricardo III” de Shakespeare realizado por Claudio Guerín Gil, o estos “Doce hombres sin piedad” de Reginald Rose que lleva el toque mágico de Pérez Puig.

Gracias a Frean, el cámara que ha grabado las imágenes para elaborar esta pieza del Telediario y que nos ha puesto a todos las pilas, tenemos, por fin, el estudio preparado: tres sillas en el centro rodeadas de sombras con una luz cenital que destaca sólo a nuestros invitados. Antes de dejar la sala de espera llegan unas señoras que saludan a Osinaga y creen reconocer también a Manolo Alexandre. Se acercan a él pero no consiguen recordar su nombre. Alexandre se levanta, les da la mano y dice: “Manolo Gómez Bur, señoras, encantado”.

¡Es un pillo este abuelo!

carlos.ruscalleda@rtve.es