Un diseño coherente de la ciudad favorece la convivencia y fomenta un estilo de vida saludable en los ciudadanos.
Las áreas urbanas, a menudo, son lugares poco saludables y es necesario un diseño coherente de la ciudad que favorezca la convivencia y fomente un estilo de vida saludable en los ciudadanos, ¿Cómo conjugar salud y urbanismo?. Las políticas de planificación urbana requieren la introducción de criterios relacionados con la salud de las personas tanto en el diseño urbano como en la planificación. Desde hace un tiempo existe un debate para reorientar los enfoques convencionales del urbanismo y de la salud pública posibilitando conexiones entre ambas disciplinas en un marco de gobernanza a múltiples niveles en el que la ciudadanía cuente y participe.
Miryam de la Concepción González Rabanal, directora del Curso institucional de Experto Universitario y Experto Profesional en Salud Urbana (Salud Pública Municipal), profesora titular del Departamento de Economía Aplicada y Gestión Pública, UNED;
José Ramón Mora Martínez, Jefe de Servicio Desarrollo Directivo y Gestión de Servicios Sanitarios de la Escuela Nacional de Sanidad;
Experto Universitario en Salud Urbana
Experto Profesional en Salud Urbana