Sinopsis
Corría el año 82 y Madrid era una ciudad ávida de experiencias nuevas. Por el bar Pentagrama, donde pinchaba el mismo Johnny Cifuentes, pianista de Burning, se dejaban ver unos jovencísimos Antonio Vega, Enrique Urquijo, Alaska o Santiago Auserón.
A solo unos metros en la calle Palma, una pareja de pintores conocidos como Costus abrían la llamada Casa Convento por la que pasarían Almodóvar, McNamara, Carlos Berlanga y hasta los Pecos para convertirse en uno de los puntos neurálgicos del movimiento. De toda España llegaban músicos deseosos de compartir la fiesta.
Madrid, se perfila como la capital más divertida de Europa. De las noches del Rock-Ola a las cañas en la Bobia muy cerca del Rastro madrileño donde empezó todo, allá por el año 77, cuando Alaska, El Zurdo, Nacho Canut, Carlos Berlanga, Enrique Sierra o Manolo Campoamor fundan Kaka de Luxe el grupo punk del que partiría la Nueva Ola Madrileña.
Noches de sexo, drogas y rock and roll que tocarían a su fin, prácticamente, mediada la década. Adiós al programa referencia de los modernos: La edad de oro. Cierra Rock-Ola tras un apuñalamiento y miles y miles de madrileños no dudan en salir a la calle para llorar a su queridísimo alcalde Enrique Tierno Galván, fallecido en enero de 1986.
Atrás queda el sueño de una ciudad y toda una época que puso a la capital en el mapa en frenético movimiento.
