Alfonso Martínez Bellas, de 22 años, era de A Coruña. Estaba casado, tenía un hijo pequeño y su esposa estaba embarazada del segundo. Estaba destinado en la 111 Comandancia de Madrid, pero le habían mandado temporalmente al País Vasco para reforzar las plantillas de la zona.
Fue asesinado por ETA el 20 de septiembre, cuando estaba comiendo con tres compañeros de trabajo, Antonio García Argente, Mariano González Huergo y Miguel Hernández Espigares, en el restaurante Arrieta, de la localidad de Marquina.
Véase el relato completo del atentado en Antonio García Argente.
Véase también Mariano González Huergo y Miguel Hernández Espigares.