Antonio Huegun Aguirre, taxista guipuzcoano de 43 años, casado y con dos hijos, fue asesinado el 14 de mayo de 1982. Su cuerpo apareció en unos matorrales de Arrate con cinco impactos de bala en la espalda. Horas antes había llamado a su domicilio para comunicar que realizaba un servicio en Eibar, donde más tarde fue localizado su coche.
Los taxistas de San Sebastián convocaron una huelga de dos días.