Rafael Morales Ocaña, de 33 años, estaba con su esposa, María Teresa Daza Cecilia, en el Hipercor de la avenida barcelonesa de la Meridiana, cuando fue asesinado por la organización terrorista ETA tras la explosión de un coche bomba, colocado en el aparcamiento subterráneo de los grandes almacenes el 19 de junio de 1987. Tenían un hijo de 7 años y vivían en la localidad barcelonesa de Santa Coloma de Gramanet.
El periódico El País publicó que Rafael Morales había sido juzgado en consejo de guerra por los enfrentamientos del vecindario colomense con la Guardia Civil en 1972, para exigir la construcción de un ambulatorio para la ciudad. Por ese motivo y por su activismo en movimientos sociales, Rafael era muy popular en Barcelona.
Véase el relato completo del atentado en Milagros Amez Franco.
Véase también Sonia Cabrerizo Mármol, Susana Cabrerizo Mármol, Felipe Caparrós Ubierna, María Teresa Daza Cecilia, María Paz Diéguez Fernández, María Emilia Eyre Diéguez, Mercedes Manzanares Servitjá, María del Carmen Mármol Cubillo, Matilde Martínez Domínguez, Mercedes Moreno Moreno, Consuelo Ortega Pérez, Luisa Ramírez Calanda, Luis Enrique Saltó Viñuales, Bárbara Serret Cervantes, José Valero Sánchez, María Rosa Valldellou Mestre, Xavier Valls Bauzá, Jordi Vicente Manzanares y Silvia Vicente Manzanares..