Raúl se reencuentra con La Cibeles
- El capitán blanco coloca una bufanda y dos banderas a la diosa
- Decenas de miles de aficionados esperaron durante cuatro horas la llegada de los jugadores
El capitán del Real Madrid, Raúl González Blanco, ha coronado a La Cibeles con una bufanda y dos banderas del equipo blanco para festejar el trigésimo primer título de Liga del equipo blanco ante decenas de miles de seguidores del equipo blanco tras la victoria ante el Osasuna.
Raúl subió a la pasarela preparada para la ocasión, besó a la Diosa, le colocó la bufanda y ondeó una bandera del Real Madrid y de España antes de ponérsela con mimo también en el cuello. Después le situó otra grande más del Real Madrid como estandarte en el brazo.
Después de cambiarse en el Santiago Bernabéu a un autobús descapotable blanco especial para festejar las 31 Ligas, el equipo llegó por el Paseo de la Castellana con la mayoría de los jugadores ataviados con banderas de sus países y una camiseta conmemorativa.
Además, el defensa Sergio Ramos llevaba en su pecho lucía la foto del malogrado futbolista del Sevilla Antonio Puerta, con una emotiva frase de recuerdo: siempre con nosotros.
Los jugadores, exultantes
Con bufandas en la cabeza, gorros y eufóricos por su título, los futbolistas, muchos de ellos con su propia cámara de vídeo, no pararon de saltar, bailar y cantar.
"Es precioso, ha valido la pena que hayan esperado y hayamos podido celebrarlo con ellos", ha asegurado el entrenador del club, Bernd Schuster, a Real Madrid TV.
"Los campeonatos son para ellos, me encantaría estar ahí disfrutando y bailando. También tenemos que aplaudirles nosotros a ellos. Tengo la piel de gallina", ha añadido el defensa Heinze.
Cuatro horas de espera
Subidos en semáforos, señales de tráfico o árboles, los seguidores madridistas esperaron durante cuatro horas a que el equipo llegara desde Pamplona después de su épica victoria en el Reyno de Navarra.
Campeones, campeones fue el cántico más escuchado junto al de Raúl, selección y otros en recuerdo a sus héroes y también al eterno rival.
A la celebración se sumaron como invitados de excepción los aficionados del CSKA de Moscú, que ha ganado la Euroliga de baloncesto en la Final Four que se ha celebrado en Madrid.
Celebraciones postergadas
Tras este acto, las celebraciones del título se postegarán hasta que acabe la liga, ya que los jugadores se centrarán en preparar el partido del miércoles ante el Barcelona, donde los azulgrana deberán hacerles pasillo.
De esta forma, los actos institucionales en el Ayuntamiento, la Comunidad de Madrid o la Catedral de La Almudena no se llevarán a cabo hasta el lunes 19 de mayo, después de que reciban la Copa que les acredita como de campeones en el último partido ante el Levante.