Enlaces accesibilidad

El campeón se da un festín a costa de un Barcelona irreconocible

  • Real Madrid vence con contundencia al Barcelona por 4 a 1
  • Los blancos cierran el partido con dos goles en los primeros veinte minutos
  • El equipo de Schuster avasalló al Barça y el resultado pudo ser más amplio

Henry marcó el gol del honor en la recta final del partido

  •  

Enlaces relacionados

Por
Los jugadores del Real Madrid  celebran el primer gol del equipo blanco, anotado por Raúl.
Los jugadores del Real Madrid celebran el primer gol del equipo blanco, anotado por Raúl.

La "jornada del pasillo", antepenúltima y decisiva, confirmó la depresión del Barça, un equipo sin confianza ni motivación, en crisis, que a fuerza de olvidarse del presente para renovar las ilusiones de futuro ha terminado perdiendo definitivamente la segunda plaza; a falta de dos jornadas, el Villarreal, con Nihat en estado de gracia, le aventaja en siete puntos.

Así, Pep Guardiola, si se confirma su llegada, tendrá que conseguir plaza en la próxima Liga de Campeones pasando por la primera ronda de clasificación, algo engorroso y arriesgado en un año de Eurocopa en el que los jugadores más importantes apenas contarán con vacaciones.

Mientras se confirma y llega el relevo, el que se va pero que aún sigue, Frank Rijkaard, tuvo que presenciar con el estómago encogido la fiesta del flamante campeón de Liga, que celebró el título a lo grande frente a su histórico rival con dos goles en los primeros veinte minutos y un juego muy superior al del equipo catalán. Superior en motivación, planteamiento táctico, confianza y despliegue físico.

En la segunda mitad, Higuaín, el héroe de Pamplona, marcó el tercero ante el delirio de la hinchada y Van Nistelrooy, que regresaba tras un mes de baja supliendo a Raúl, anotó de penalti el cuarto. En medio de la debacle de un equipo hundido y desdibujado, parecía que habían pasado siglos desde aquella noche en la que tronaron los aplausos del Bernabéu a un pletórico Ronaldinho.

Solo Messi, que puso en serios aprietos a Casillas, que respondió con dos excelentes paradas y Henry, que marco el tanto del honor, salvaron el tipo en un partido que la afición del Barcelona querrá olvidar cuanto antes.