Edurne Pasabán: "La montaña es mi vida y soy feliz"
- Cuatro amigos de la montañera vasca han perdido la vida en el Dhaulagiri
- Pasabán sufrió congelaciones en los pies mientras escalaba el K-2
- Es la tercera mujer que ha logrado coronar diez ochomiles
Entrevistada en Los Desayunos de TVE, la montañera Edurne Pasabán se considera una privilegiada porque con 34 años está haciendo lo que le gusta. La alpinista de Al Filo De Lo Imposible es la tercera mujer que ha conseguido coronar diez montañas de más de 8.000 metros de altura.
En su última cumbre, el Dhaulagiri cuatro amigos de Pasabán han perdido la vida algo que "es muy duro" según la montañera guipuzcoana. El último falleció al auxiliar a un compañero mientras descendían al campo base.
Esta alpinista explica que en la cumbre "se piensa poco" y que el momento más intenso es cuando "te quedan 20 metros para hacer cima y ves que tu objetivo está a tu alcance". Pasabán reconoce que en ocasiones se le saltan las lágrimas de la emoción, pero que una vez coronada la montaña lo más importante es el descenso y llegar al campo base.
Partir de cero
La montañera admite que en el K-2 le vió "las orejas al lobo" al tener que abandonar el ascenso y sufrir congelaciones en los dedos de los pies. Una experiencia complicada que le obligó a empezar de cero. Con eso y con todo, Pasabán no se arrepiente de haber dejado la ingeniería porque "la montaña es mi vida y soy feliz".
Los próximos retos para ella son escalar los cuatro ochomiles que le quedan para completar las cumbres más altas de la tierra. Es decir, el Shisha Pangma (8.046m.), el Annapurna (8.091m.), el Manaslu (8.163m.) y el Kangchejunga (8.586m.).