El proyecto de Champions del Zaragoza se convierte en el descenso más amargo

• Hasta tres entrenadores han pasado por el banquillo del equipo
• El Zaragoza empezó la temporada cayendo en primera ronda de la UEFA
• El club había realizado el mayor desembolso de su historia

Los jugadores del Zaragoza abandonan el campo abatidos tras consumarse el descenso.

El Zaragoza consumó su descenso tras caer derrotado ante el  Mallorca por 3-2 en la última jornada del campeonato nacional de  Liga, y dijo adiós a la Primera División en la temporada que más había invertido con el objetivo de lograr la clasificación para la  Liga de Campeones.

El mayor desembolso de la entidad maña en toda su historia, con los fichajes de Oliveira, Matuzalem, Ayala, Pavón, Paredes y Gabi, entre otros, se ha traducido en el descenso a Segunda en una campaña que no comenzó con buen pie con la tempranera eliminación de la Copa de la UEFA.

Con Víctor Fernández en el banquillo, los maños se despidieron a las primeras de cambio de la Copa de la UEFA, tras perder ante el AEK de Atenas. Sin embargo, la eliminación continental no enderezó el rumbo de los zaragozanos que encadenaron una de sus peores rachas al comienzo de la campaña.

Los aragoneses no vencieron su primer encuentro hasta la cuarta jornada liguera, ante Osasuna (2-1) y han sido incapaces de encadenar tres triunfos consecutivos en toda la temporada. Sin embargo, su peor racha llegó en el mes de noviembre.

Desde el día 4, cuando cayeron frente al Valladolid en casa (2-3) no ganaron un choque hasta el 20 de enero de 2008, en la visita del Murcia a la Romareda. Pero el desastroso tramo de los maños no sólo les relegó a puestos de la zona caliente de la tabla, sino que se cobró el cargo de Víctor Fernández, el día 13 tras el empate ante el Mallorca (2-2).

Después de Fernández llegó Ander Garitano, con las ideas claras y con una victoria importante en Liga, pero una serie de discrepancias acabaron con el periplo del nuevo entrenador. Las desavenencias sobre el comportamiento de D'Alessandro acabaron con su puesto sólo dos partidos después de su contratación.

Y a partir de ahí se hizo con las riendas Manolo Villanova, un hombre de la casa que no ha podido evitar el descenso a Segunda, donde el Real Zaragoza jugará por decimonovena temporada en toda su historia. Los maños, además, saben lo que es jugar en la división de plata del fútbol español de forma reciente.

En la temporada 2001-02, los zaragozanos descendieron pero lograron regresar a la máxima categoría solo un año después. Ahora, con jugadores con una ficha desorbitada para la Liga BBVA, el Zaragoza deberá replantear un proyecto que ha hecho aguas y que estaba diseñado para ser el mejor de la historia del club.