Estudiantes y Akasvayu Girona luchan contra su crisis económica

• Ambos clubes podrían abandonar la ACB si no mejoran sus cuentas

La Fundación Estudiantes celebra una Asamblea para informar a los socios de la comprometida relación con la dirección del club estudiantil.

La Fundación Estudiantes, presidida por José Castellano, celebró el miércoles una asamblea abierta en la que se confirmó la celebración de la Junta Directiva el próximo 27 de junio que analizará las posibilidades de que el club pierda su condición de equipo ACB. Además de Castellano, presidente del club y de la Fundación, acudieron Javier Ortega, secretario y directivo del club, Jesús Pozo, asesor de la Fundación, Fernando González Frade, patrono del club, y el ex-jugador estudiantil Nacho Azofra.

El presidente, José Castellano, denunció el grave estado de deterioro en que se encontraba la Sociedad Anónima a su llegada al club, criticando la existencia de un "gran vacío de poder" y con un Consejo muy poco operativo. "Cuando me incorporé al club, no había ni Director General, ni Financiero, ni Deportivo. Poco después, Bermúdez abandonó su cargo, generando un vacío de poder aún mayor. A ello, había que añadir la presencia de un Consejo en el que nadie tomaba responsabilidades", declaró Castellano.

Una vez en el cargo, el nuevo presidente trató de convertirse en gestor único del club, algo que la Fundación Estudiantes trató y trata de evitar. "Con la Fundación, siempre vas a poder elegir quién está en Estudiantes, pero con Tejedor nunca más. Tiene legitimidad para seguir siendo presidente, pero tienen que ser los aficionados quienes lo decidan", afirmó Nacho Azofra.

El secretario y directivo del club estudiantil,Javier Ortega, recordó que de no solucionarse la causa de disolución en la que se encuentra Estudiantes, la S.A.D. correría serio riesgo de desaparecer. "Si el 14 de julio no desaparece la causa de disolución, Estudiantes no podría participar el año que viene en la competición al llevar dos años en la misma situación. Si no se llega a un acuerdo, correría serio riesgo de desaparecer".

Acto seguido, sin embargo, el propio secretario dejó ver su esperanza de que la ACB no llegara a tal extremo, alegando que "otros clubes se encuentran en la misma situación que Estudiantes", aunque la situación podría llegar a afectar al propio club. "En principio no, pero el concurso de acreedores podría llegar a afectar al club. El club mantiene una deuda con la S.A.D. que fue cancelada por patronato, pero los nuevos accionistas, en caso de darse, podrían reclamarla", explicó.

Jesús Pozo, que cifró el agujero económico en 2.6 millones de euros, aclaró que "bien gestionado, el Estudiantes puede sobrevivir perfectamente como hasta ahora". "La Fundación existe como elemento de consistencia adicional para arreglar ese desequilibrio patronal", añadió Castellano.

El Akasvayu juega su partido más importante contra la crisi económica

El Estudiantes no es el único club que atraviesa dificultades económicas. A pesar de haber estado a un gran nivel deportivo, el Akasvayu Girona también tiene seriamente comprometido su futuro por culpa del capítulo económico.

Las palabras del técnico, Pedro Martínez, al final del último encuentro de la temporada distaban bastante de lo que se podía considerar una buena valoración: "desgraciadamente el momento es muy malo y lo que ha acontecido en los últimos días en el seno del club es para estar muy preocupado". "Estoy preocupado por la continuidad del baloncesto en Girona, lo estoy por mí, pero sobretodo por el club y la ciudad que llevan muchos años en la ACB", añadió.

El entrenador del conjunto catalán se refería con ello a los problemas de cobro que ha tenido la plantilla durante la temporada y en concreto en estos últimos meses, y también a la grave crisis económica que sitúa al CB Girona con un déficit acumulado de nueve millones de euros. La situación en este sentido no es nueva, ya que la deuda es conocida des de hace mucho tiempo, aunque la ACB ya abrió un período de dos años para arreglar esta irregularidad sin que en Girona se haya encontrado la solución para conseguirlo.

Ahora, club e instituciones trabajan contra reloj para encontrar una solución a tiempo. Para el futuro, si se consigue una solución y se puede resolver el capítulo de la deuda histórica, McDonald y Cvetkovic son los únicos que tienen contrato en vigor. También Sada y San Emeterio pueden ser renovados unilateralmente por el club, pero esto no indica que vayan a quedarse, ya que ambos tendrán ofertas sobradas para cambiar de aires. Do todas maneras, lo más inmediato es la solución a la crisis económica para evitar la disolución que pide la ACB para los clubes morosos.