Rafa Nadal pasa a octavos de final tras eliminar a Nicolas Kiefer en Wimbledon
- El mallorquín gana al alemán por 7-6, 6-2 y 6-3 en el torneo de Wimbledon
- Nadal tendrá como próximo rival o al ruso Youzhny o al checo Stepanek
- España se queda sin representación femenina tras la marcha de María José Martínez
El español Rafael Nadal, número dos del mundo, se ha colocado con paso firme en los octavos de final del torneo de Wimbledon, tercer grande de la temporada, tras eliminar en dos horas y 22 minutos y por 7-6 (3), 6-2 y 6-3 al alemán Nicolas Kiefer.
Rafael Nadal ha liquidado al alemán en una jornada en la que Guillermo García López ha dicho adiós al torneo y en la que España se ha quedado sin representación femenina tras la marcha de María José Martínez.
El mallorquín, tetracampeón de Roland Garros, tendrá como próximo rival al vencedor del duelo que disputan el ruso Mijail Youzhny, décimo séptimo favorito, con el checo Radek Stepanek, decimosexto cabeza de serie.
Nada más concluir el partido, Nadal ha elogiado el juego de Kiefer, del que ha recordado que es un "oponente difícil en todas las superficies, especialmente aquí".
"Tiene un gran saque, volea muy bien, es un jugador agresivo, pero yo creo que he hecho un buen desempate y a partir de ahí, comencé a jugar mejor", ha comentado el mallorquín.
A falta todavía de su próximo adversario, Nadal ha indicado que estaba satisfecho de estar en la cuarta ronda, pero ha admitido que era consciente de que cualquiera de esos dos jugadores "será un rival muy difícil". "Trataré de centrarme en mi juego y ver qué pasa", ha afirmado.
En teoría, el balear debería haber rematado el primer set ante Kiefer sin apenas inmutarse. En la práctica, el balear ha necesitado algo más de una hora, y un desempate para llevarse este primer parcial, en el que Nadal parecía no encontrarse del todo cómodo en la "Catedral", y quizás ha acusado la sorpresa de la solvencia y la determinación del jugador germano con el servicio.
Kiefer ha recurrido a la efectividad de un saque sólido con el que rubricó un total de 13 "aces" y ha sido el primero en disponer de una bola de ruptura en el séptimo juego que ha salvado el mallorquín, quien ha puesto la firma a la manga con un 7-3 en un desempate en el que ya no ha titubeado y que se ha inclinado fácilmente del lado del balear.
Si el zurdo de Manacor, que ha sumado en los tres sets cinco saques directos, se mostró inquieto e incómodo durante el arranque del duelo en la Central, inició el segundo set con dosis extras de motivación. Y aquí ya sí, Nadal logró convertir su primera ocasión de rotura para quebrar el servicio de su rival y ponerse con 3-0 a su favor. Desde ese momento, se vio al verdadero Nadal.
Angustia de Kiefer "in crescendo"
La angustia de Kiefer iba 'in crescendo' a medida que el zurdo de Manacor se metía más en el partido y soltaba el brazo. La manga era del tetracampeón de Roland Garros, que esta vez apenas tardó 33 minutos en arrollar a su rival.
La presión empezó a hacer mella en Kiefer, un jugador visiblemente disminuido ante el cada vez más imparable Nadal, que hacía gala de golpes certeros y aprovechaba cada oportunidad de ruptura.
Nadal rompió al alemán en cuatro ocasiones de las seis oportunidades de rotura de las que dispuso en todo el encuentro frente al único robo de saque que logró Kiefer en el primer set.
El alemán, que cometió el mismo número de golpes ganadores como de errores no forzados (24 en ambos casos), tan sólo pudo hacer un juego al campeón balear, que ventiló la ronda firmando el tercer parcial por 6-1.