Carlos Sastre pasea el maillot amarillo por las calles de París
- El abulense afronta la última etapa como un paseo triunfal por las calles de París
- Se convierte en el séptimo español en ganar la gran ronda gala
- Oscar Freire llega a la capital francesa con el maillot verde de la regularidad
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Carlos Sastre afronta la última etapa del Tour de Francia como un mero trámite antes de coronarse definitivamente como el vencedor de la edición de este año. Arropado por sus compañeros de equipo, el abulense saborea el que es su paseo triunfal por los Campos Elíseos de la capital gala. Es el séptimo ciclista español que sube de amarillo al podio de París, tras aguantar su renta ante el australiano Cadel Evans en la contrarreloj decisiva, en la que se impuso el alemán Stefan Schumacher (Gerolsteiner).
Sastre, de 33 años, será el sucesor de Oscar Pereiro y de Alberto Contador y llevará a España el tercer título consecutivo en la carrera más importante del mundo por etapas. Con una actuación sobria y en otro despliegue de coraje y confianza, el ciclista madrileño afincado en El Barraco ha sabido guardar el minuto y medio que tenía de margen y ha llegado brazo en alto a la meta, directo al libro de la historia.
"Muchas gracias a todos". Fue lo único que pudo decir cuando llegó exhausto después de cubrir los 53 kilómetros que separaban Cerilly de Saint Amand Montrond, en una batalla en la que Sastre, igual que Contador hace un año, batió al gris Cadel Evans, impotente al ver que pasaban los kilómetros y el español no cedía. Dio todo lo que llevaba dentro, como anunció en la víspera con toda la tranquilidad del mundo, como si no se jugara nada. Sus prestaciones, a pesar de tratarse de un escalador, fueron inmejorables. Supo regular, mantuvo el ritmo y aún igualó los tiempos de su compañero Cancellara en el último tercio del recorrido.
Sastre, que apuntará el undécimo título español en el libro de oro de la 'grande boucle', se clasificó duodécimo a 2.34 del alemán Stefan Schumacher, que ganó en la cronometrada de Cholet y repitió en Saint Amand, y a tan solo 29 segundos de Evans, que naufragó y hubo de conformarse otro año con la segunda plaza. Los españoles se han convertido en su bestia negra. A continuación de Schumacher se clasificó el suizo Fabian Cancellara (CSC), el doble campeón del mundo contrarreloj que le marcó la pauta a Sastre. Tercero fue el luxemburgués Kin Kirchen (Columbia) y el ruso Denis Menchov (Rabobank) sexto a 1.55. Evans se fue a la séptima plaza a 2.05.
La foto final encargada para los Campos Elíseos ha quedado definida con Carlos Sastre en lo más alto. El segundo escalón será para Cadel Evans (a 1.05) y el tercero para el austríaco Berhnard Kohl, que salvó el tipo, a 1.20. Dentro de los diez primeros se mantuvieron Samuel Sánchez, séptimo a 6.31 y Alejandro Valverde, finalmente noveno a 7.26.
No fue una contrarreloj de infarto. Desde el principio Sastre transmitió buenas sensaciones: buena frecuencia de pedalada, seguridad, confianza. Todo vestido de amarillo salió dispuesto a abrazar la gloria. "Voló" realmente, como pedía su director, el danés Bjarne Riis. En el kilómetro 18 las noticias no podías ser mejores. Evans solo le redujo 8 segundos y Menchov 16. Pecata minuta. En el 36 se mantenían las constantes. El español mantenía a Evans a 1.11 en la general, a Kohl a 1.13 y a Menchov a 1.54.
Quedaba el tramo final. Lejos de ceder, Sastre rodó al mismo nivel de Cancellara, lo que significa que aún se superó en los últimos 15 kilómetros. El vecino de El Barraco, mientras sus paisanos saltaban de alegría en la plaza del pueblo, encontró las alas al maillot amarillo. El "Hombre tranquilo", tuvo palabras emotivas al recordar a su fallecido cuñado, "Chava" Jiménez, el hombre que le hizo ver "la realidad de la vida con el ciclismo" y con quien entró en la meta, de manera simbólica, como le hubiera gustado al ex corredor del Banesto. "Es la persona que más me ha hecho llorar en la vida. Su derrota ha sido mi victoria", ha dicho el campeón.
El resto de los podios también han quedado definidos. Kohl se irá a Austria con la camiseta de puntos rojos como rey de la montaña, Andy Schleck el maillot blanco al mejor joven y otro ilustre, Óscar Freire, será el primer español en llegar de verde de la regularidad a París.
Después de la Eurocopa de fútbol y de las hazañas de Rafa Nadal en Roland Garros y Wimbledon, ahora llega la locura del deporte español con el Tour de Carlos Sastre. En víspera de los Juegos Olímpicos. Que siga la fiesta, como en El Barraco y en toda España.