Los saltadores españoles envidian las instalaciones de Pekín

El madrileño Javier Illana y la grancanaria Jenifer Benítez, representantes españoles en la competición de saltos de trampolín de Pekín 2008, han lamentado la falta de instalaciones adecuadas como en las que están trabajando en la capital china.

El saltador del Real Canoe, que cumplirá su segunda participación olímpica y referencia actual española en esta disciplina, ha afirmado que les da envidia "más que nada por las instalaciones que tienen, los gimnasios y por cómo se mueve aquí todo". "Si tuviéramos lo mismo en España podríamos trabajar muchísimo mejor", ha aseverado.

La canaria Benítez, que debutará en unos Juegos, ha resaltado que su deporte "es muy sacrificado y muy poco valorado". "Si tuviéramos estas condiciones de instalaciones en España habría muchísimos más saltadores", ha comentado.

En este sentido, Manuel Gandarias, responsable técnico de saltos de la Federación y entrenador de Illana, ha comentado que en España hay serias carencias no tanto en cuanto de plataformas y trampolines, "sino de todo el conjunto que los rodea, gimnasio, trampolines en secos". "Tenemos que adaptarnos realmente hacer milagros para poder conseguirlo", ha indicado.

En el aspecto deportivo, Illana, decimonoveno en Atenas, ha reiterado que su "objetivo principal es entrar en la final" y "luego hacerlo lo mejor posible, entrar entre los ocho primeros, conseguir un diploma y, si se puede lograr, una medalla, aunque siendo aquí, en las instalaciones de los chinos, siendo deporte nacional, está complicado".

El saltador madrileño ha explicado que no piensa modificar sus saltos en las eliminatorias para tratar de asegurar su participación en la final, en la que, si llega, sí que introducirá dos novedades para incrementar la dificultad.