Los Juegos de Pekín abren sus puertas
- La ceremonia reflejará la tradición y el espíritu olímpico de China
- Los organizadores guardan en secreto la identidad del último relevista de la antorcha
- Televisión Española realizará el mayor despliegue de su historia, síguelo en rtve.es
- España desfila a las 16:15 con Davil Cal como abanderado
A las ocho y ocho minutos del octavo día del octavo mes del año Pekín abrirá sus puertas al movimiento olímpico con la ceremonia de inauguración de sus Juegos Olímpicos, en un espectáculo en el que se reflejará la tradición y el espíritu olímpico de China.
El acto en el que intervendrán un total de 50.000 personas, durará 3 horas y media y estará coordinado por el prestigioso director de cine Zhang Yimou, después de que Steven Spielberg se negara, a principios de año, a asesorar el espectáculo como protesta al fracaso que supusieron los deseos de paz en la región de Darfur.
Y es que estos Juegos Olímpicos han estado rodeados de una gran polémica, tras la violenta represión de las protestas en el Tíbet en marzo pasado.
Por este motivo muchos jefes de Estado retrasaron el anuncio de su presencia. Finalmente, muchos de ellos estarán presentes en el palco de honor, entre ellos los presidentes de Estados Unidos, George W. Bush; de Francia, Nicolas Sarkozy, y de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva.
Sin embargo, otros como Ai Weiwei, uno de los diseñadores y creadores del "nido de pájaro" no asistirá a la ceremonia, según sus palabras "lo que quería representar era libertad, coraje, fuerza, y no autocracia. China tiene que cambiar, un gobierno no puede negar la justicia y robar la felicidad y la risa de su pueblo".
Uno de los eventos más espectaculares jamás vistos
Unas 70.000 personas, entre atletas, actores, estudiantes, militares y otros participantes, estarán implicadas en esta colorida producción. Otras 90.000 la presenciarán en las gradas del estadio, contando público e invitados, y miles de millones en todo el planeta la seguirán por televisión.
La delegación anfitriona, que aspira a terminar este año por primera vez en lo más alto del medallero final, por delante de Estados Unidos, cerrará la marcha con un número sin precedentes de atletas, 639 atletas.
Como es tradición, el secreto que los organizadores guardan con más celo es la identidad del último relevista de la antorcha, "un atleta chino seleccionado por sus logros olímpicos", y el encendido de la llama en el pebetero, "que será espectacular".
La ceremonia tendrá como colofón un espectacular castillo de fuegos artificiales, entre ellos, un dragón de fuegos artificiales de tres kilómetros de largo, que iluminará el cielo de Pekín inmediatamente después de izarse la bandera olímpica. "Una fiesta visual y auditiva maravillosa en el país donde se inventaron" con casi 30.000 lanzamientos pirotécnicos.
La transmisión de fragmentos de la ceremonia de inauguración en la televisión coreana la semana pasada hizo que los organizadores de los Juegos prohibieran desde el lunes la entrada de cualquier tipo de cámara al Estadio Nacional.
Sin embargo, a las ocho y ocho minutos del día ocho del mes ocho, las puertas se abrirán a las cámaras de todo el mundo, entre las que se encontrarán las de Televisión Española, con el mayor despliegue de su historia para ofrecer los Juegos Pekín, que podrán verse en todos sus canales, móviles e Internet.