Marta Vilajosana termina 19ª en la prueba de contrarreloj femenino, que gana Kristin Armstrong
- La ciclista estadounidense ha hecho un tiempo de 34 minutos, 51 segundos y 71 centésimas
- Marta Vilajosana ha sustituido a Maribel Moreno, que se retiró tras un positivo por EPO
- La plata ha sido para la británica Emma Pooley, el bronce para la suiza Karin Thurig
La ciclista estadounidense Kristin Armstrong se ha hecho con la prueba de contrarreloj femenina de los Juegos de Pekín con un tiempo de 34 minutos, 51 segundos y 71 centésimas.
En una carrera marcada por el asfixiante calor y los fuertes desniveles del circuito que atraviesa en tres ocasiones la Muralla China, la segunda posición ha sido para la británica Emma Pooley con 35 minutos y 16 segundos, mientras que el bronce se lo ha llevado la suiza Karin Thurig, con 35 minutos y 50 segundos.
Menos suerte ha tenido la española Marta Vilajosana, 33 años, que paró el crono en 37 minutos y 54 segundos, terminando la prueba en la decimonovena posición.
La ciclista de Viladecavals no tenía previsto disputar esta prueba en Pekín, pero al marcharse Maribel Moreno -alegando primero una crisis de ansiedad que después se supo que fue un positivo por EPO en un control- la catalana tuvo que hacerse cargo de la representación española femenina en la prueba de contrareloj.
"Ésta era una prueba que no era para mí, era para escaladoras y esa no es mi especialidad, pero estoy contenta con el resultado", decía Vilajosana nada más cruzar la línea de meta.
Y es que, afectivamente, el recorrido de 23 kilómetros diseñado para esta prueba no era el más adecuado para la ciclista catalana,que siempre ha sido mejor rodadora que escaladora.
"El trabajo siempre se paga y siempre da sus frutos, por eso a pesar de que ésta es una prueba que yo no había preparado prácticamente nada y que he tenido que correr para cubrir la baja de Maribel estoy contenta", señalaba la ciclista.
Con un calor asfixiante y una humedad que en ocasiones ha superado el 90%, las ciclistas tuvieron que afrontar fuertes desniveles, sobre todo en la primera parte del circuito y una dura subida al final de él, enmarcados, eso sí, en unos paisajes espectaculares, con la Gran Muralla de fondo y los verdes paisajes chinos.
Quien tampoco tuvo suerte fue la francesa Jeannie Longo-Ciprelli, que a sus 49 años y con seis Juegos Olímpicos a su espalda terminó cuarta, a tan sólo un segundo de la medalla de bronce.