El deporte español aún tiene 12 opciones claras de medalla

• El deporte español aún tiene, por lo menos, una docena de opciones claras de medalla
• Además, nuestros atletas todavía darán más de una sorpresa en estos Juegos
• Tras un comienzo fulgurante, nuestro medallero se ha estancado en dos metales

España tiene opciones claras de medalla en natación sincronizada.

Dos medallas, dos alegrías y ya. Hasta el momento, el buen inicio de los Juegos se ha quedado en eso, en los metales de Samuel Sánchez en ciclismo y 'Pirri' en esgrima. Inolvidables pero escasos ante el potencial que se nos presupone.

Desde entonces, nos hemos conformado con diplomas, las 'casi medallas' que nunca se recuerdan. Nos quedamos a ocho segundos del bronce en ciclismo, aun waza-ari del podio en judo y lejos de la gloria en las aguas de 'El Cubo'.

No obstante, aún es pronto para hablar de fracaso. Casi en el ecuador de la competición, aún queda, por lo menos, una docena de opciones reales de conseguir más medallas y, siendo optimistas, de volver a escuchar el himno español en Pekín.

Apuestas seguras

Tan sólo queda un representante de la 'armada española', pero es un auténtico ciclón. Rafa Nadal avanza imparable hacia la final individual de tenis. Tras machacar a Melzer en cuartos, una apuesta por el número 1 del mundo no dará mucho dinero, pero sí una victoria segura.

Por su parte, los 'chicos de oro' del baloncesto, salvo debacle inesperada, lucharán por el oro el 24 de agosto. A pesar de momentos de juego irregular ante China y Alemania, los de Aíto se han sabido sobreponer y han sumado sus partidos por victorias. Los campeones del mundo no se irán con las manos vacias de Pekín.

Bajo el agua, Gemma Mengual y el combinado nacional que participará en natación sincronizada aseguran metal. La catalana ha pronosticado dos medallas para la selección española, un resultado realista y acorde con la calidad de nuestras chicas.

Gervasio Deferr, un puntal de la gimnasia artística mundial quiere otro tatuaje con los aros de 'Beijing 08'. El doble campeón olímpico disputará la final de suelo, en la que parte como favorito para colgarse el oro.

Y no hay que olvidarse del triatlón ni mountain bike, deportes donde España brilla con luz propia. Contamos con el mejor triatleta del mundo,  Javier Diaz Noya. El 'superman español' es otra apuesta segura de medalla, sin olvidarse de Iván Raña, que llega en un gran momento a la competición. Sobre la bicicleta, el subcampeón olímpico José Antonio Hermida y la actual campeona del mundo, Marga Fullana, parten como favoritos para el oro.

El atletismo alimentará nuestro medallero

Este viernes comienza el deporte rey de los Juegos y contamos con varias bazas para conseguir medalla. La primera, en marcha, llega en la madrugada del viernes al sábado. Esta modalidad nos tiene bien acostumbrados y Paquillo Fernández parte como favortio para subir al podio, tan sólo ensombrecido por Jefferson Pérez.

En 1.500 Fermín Cacho abrió la lata y desde entonces los atletas españoles siempre han estado en las quinielas. Casado, Higuero y Estévez conforman un tridente de lujo. Estévez ya alcanzó la final de Atenas hace cuatro años y nadie duda de la presencia española en la final. Una final que se prevé, como ya avisó Casado, muy disputada por la igualdad de los atletas.

Opciones menos claras pero siempre a tener cuenta, tendremos en 3.000 obstáculos, donde Marta Domínguez, capitana del equipo español junto a Manolo Martínez, deberá hacerse con un hueco en la final; en disco, Mario Pestano hará lo propio para meterse en la final de disco y mejorar su sexto puesto en Atenas. También pugnarán por la medalla María Vasco en 20 kilómetros marcha y Ruth Beitia en salto de altura.

Y para el último día, el maratón nos puede salvar de la debacle. Julio Rey y Chema Martínez son las principales bazas españolas en la mítica carrera que cierra la competición olímpica.

Posibles medallas en deportes de equipo

Además de la medalla en baloncesto, los deportes de equipo nos deben dar más alegrías. Los metales pueden llegar en hockey, balonmano y waterpolo.

En hockey nuestra equipo ha mostrado su solvencia  y contar con una medalla no es descabellado. La selección masculina ha vencido sus tres partidos con un juego muy superior al de sus rivales y, a pesar del sufrimiento en el partido contra Nueva Zelanda, la calidad de los jugadores españoles hace pensar en podio.

En balonmano es otro cantar. Los de Juan Carlos Pastor, lastrados por la ausencia de sus pivots titulares, van creciendo a medida que avanza la competición pero rivales como Croacia o Francia hacen temer la lucha por las medallas.

Y en waterpolo, la selección se encuentra con la misma rivalidad que sus compañeros de balonmano. Equipos de la talla de Croacia o Hungría pondrán las cosas difíciles a los de Rafa Aguilar que, no obstante, son una clara opción de medalla.

Otras medallas, ¿por qué no?

David Cal, el abanderado del equipo olímpico español, bimedallista en Atenas 2004, debería darnos una nueva alegría en Pekín. No obstante, su rendimiento es una incógnita. El gallego ya avisó de que el papel de abanderado podría ser negativo y descentrarle en la competición.

Una sorpresa sería una medalla en gimnasía rítmica, donde Almudena Cid, en sus cuartos juegos, ve díficil hacerse un hueco en la final, dada la superioridad de las gimnastas del Este.

Asimismo, no sería descabellado que, sobre la arena, la pareja española formada por Mesa y Herrera luche por una medalla en voley playa tras un inicio más que aceptable de competición y reeditase la conseguida en Atenas.

Y para terminar, en ciclismo en pista, el veterano Joan Llaneras pondría un broche de oro a su carrera si consigue una medalla en Pekín.