Posiblemente, el mejor baloncesto del mundo

• La selección española y la de EE.UU. miden sus fuerzas a las 16:15, hora española
• En juego está la primera plaza del grupo B
• El duelo Gasol-Bryant, uno de los principales alicientes del encuentro

España, contra el equipo de ensueño

España y Estados Unidos pondrán en juego a partir de las 16.15 hora española la primera plaza del grupo B, en un encuentro al que ambas escuadras llegan invictas, con las dos primeras plazas aseguradas, pero con unas sensaciones en su juego bien distintas.

Un encuentro señalado en el calendario para ver a dos de los mejores equipos del momento y que los españoles encaran con ánimo de revancha, ya que nadie olvida lo ocurrido hace cuatro años en Atenas, cuando Estados Unidos dejó fuera a España en cuartos de final, siendo ésta la única derrota del equipo español durante la competición.

Un duelo donde además se vivirán varios reencuentros entre amigos. Kobe Bryant se verá las caras con su fiel escudero en los Lakers, Pau Gasol, en un partido que ambos querrían repetir, pero en la final de esta cita olímpica, al igual que José Manuel Calderón y Jorge Garbajosa que tendrán que parar a su compañero en Raptors Chris Bosh.

La selección de Aíto García Reneses deberá hacer frente a un combinado, el de Estados Unidos, que parece haberse conjurado para recuperar el prestigio dentro del escenario internacional. Mientras que la 'Roja' ha sido capaz de lo mejor y de lo peor durante las tres primeras jornadas, los norteamericanos han solventado sin grandes dificultades sus tres compromisos.

Paradójicamente, el de Grecia fue el partido más asequible de los tres de inicio. Ante China, España no fue capaz de encontrar su juego, y sólo la actividad defensiva de Ricky Rubio y el estado de gracia de Pau Gasol en ataque propiciaron una remontada de tintes épicos. Y frente a Alemania, el partido no empezó a ponerse del lado español hasta bien entrado el tercer cuarto.

Una de las principales claves para frenar a los de Mike Krzyzewski será la defensa planteada por el equipo español. Una de las escasas debilidades que presenta el combinado estadounidense en el apartado ofensivo es el ataque en estático, donde encuentra problemas con frecuencia y en el que apenas ha gozado hasta el momento de acierto en el lanzamiento exterior.

Para provocar esta situación, España manejará entre sus bazas una defensa en zona como la que comenzó a propiciar la remontada en el complicado inicio ante Alemania. La agresividad demostrada por los hombres de arriba en esta faceta, así como la intensidad de los interiores, fue capaz de complicar la circulación de balón germana y nublar las ideas de los de Dirk Bauermann.

Seguridad de los bases

Y es que tratar de establecer marcas individuales ante la manifiesta superioridad física del combinado de Estados Unidos se antoja como una tarea complicada. Junto a ello, será la clave la seguridad del trío de bases, que tendrán que calmar el partido y evitar que Estados Unidos dé rienda suelta a su contragolpe.

España, por tanto, deberá evitar caer en el juego de transiciones rápidas con el que los de Krzyzewski han pasado por encima de sus rivales. En este cometido, será de vital importancia que los bases españoles superen la presión asfixiante con la que el juego exterior norteamericano ha complicado la labor de sus rivales.

Frente a Estados Unidos, España afronta una prueba que se antoja fundamental para medir sus posibilidades de medalla. Aunque la victoria es posible, los hombres de Aíto deberán dar lo mejor de sí mismos para superar a una selección que, esta vez sí, parece decidida a ganarse la redención.