Esther Morales consigue un inesperado bronce en los 100 espalda
- La catalana logra un crono de 1.10.57 en la categoría de S10
La catalana Esther Morales ganó este sábado la medalla de bronce en 100 metros espalda S10 y se quedó a tres segundos del récord mundial que batieron al unísono la neozelandesa Sophie Pascoe y la sudafricana Shireen Sapiro, con un crono de 1.10.57.
"Cuando he llegado, me he quedado como diez segundos mirando, y volví a contar y decía, no puede ser, ¿tercera? Y es que no me lo esperaba", señaló la joven de 23 años, llorando de emoción por su primera medalla olímpica.
Morales salió con un tiempo de reacción intermedio entre la neozelandesa y la sudafricana, viró en los 50 con un crono de 35.55, pegada a las dos primeras, y tocó la pared de la piscina del Cubo de Agua con un tiempo de 1.13.77.
"Venía con 15.85, esta mañana he hecho 14.85, y ahora 13.77. Es que no puedo pedir más", añadió. Morales, que padece una agenensia en la mano izquierda, se llevó una decepción en el último mundial al no conseguir ninguna medalla, y venía a Pekín "mentalizada" de que no lo iba a conseguir, de que "era muy difícil".
Su novio, el nadador salmantino Alejandro Sánchez Palomero, bronce en 100 metros braza en estos Paralímpicos, la interrumpió para besarla delante de toda la prensa. "Me daba una envidia, la verdad", señaló la catalana, "para que no me lo eche en cara".
Estudiante de Comunicación Audiovisual, Morales empezó a ganar medallas en los campeonatos de Europa de 1999, pero la de hoy es la primera presea que consigue en unos Paralímpicos.