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España afianza el liderato de su grupo

  • España remonta el partido ante Bélgica y gana por 1-2
  • Un gol de Iniesta ponía el empate, Villa marca el gol de la victoria
  • Quinta victoria consecutiva para Del Bosque
  • Torres se lesiona y es duda para el partido en el Calderón

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Victoria con golazo de Iniesta, emulando al 'Buitre'

España ha conseguido una sufrida victoria en su desplazamiento a  Bélgica (1-2) en el que era uno de los partidos más complicados que  había deparado el calendario camino del Mundial de Sudáfrica, gracias  a un gol de Villa, quien culminó de cabeza la remontada iniciada con  un maravilloso gol de Iniesta. 

Una vez más, el delantero asturiano rescató a España y dio los  tres puntos a la Roja. Después de mucho tiempo, la selección tuvo que  remar contracorriente tras verse sorprendida por el tempranero gol de  Sonck, susto al que posteriormente se sumaba la lesión de Fernando  Torres. La salida de Cesc y la sobresaliente actuación de Iniesta  abrieron el camino hacia una remontada que vale tres puntos. 

Villa consiguió el gol del triunfo en el minuto 88, rematando en  un acto de fe un centro al segundo palo de Dani Güiza, que había  saltado al terreno de juego escasos momentos antes. El ariete del  Valencia entró con fuerza y remató de cabeza, picado, cruzado y lejos  del alcance del portero para sellar la cuarta victoria de la fase de  grupos. 

La noche prometía para España, que apenas escuchado el pitido  inicial se hacía con el dominio del esférico y ponía a prueba los  reflejos del meta belga con un chut lejano de Torres. Conocedores del  peligro del rival, los locales decidieron ceder el cuero a España y  cerrarse atrás para enmarañar el juego de los de Del Bosque. 

Pero el regalo guardaba una sorpresa para el combinado nacional.  Al primer despite de los defensores españoles, Bélgica aprovechó para  propinar un duro mazazo. Corría el minuto 7 cuando Kompany recibía  libre de marca a la salida de un córner y sacaba un centro medido al  segundo palo para que Sonck batiera de cabeza y por alto a Casillas.  

Se acabó el récord de Casillas

De un plumazo, el goleador belga acabó con el récord de  imbatibilidad del arquero madridista y colocaba a España por detrás  en el marcador, algo que no ocurría desde el partido de la fase de  grupos de la Eurocopa ante Grecia. Sin digerir aún el golpe, la  campeona de Europa recibió como un jarro de agua fría la lesión de  Fernando Torres. 

El delantero del Liverpool, héroe del último encuentro entre ambas  selecciones con dos goles que dieron la victoria a una España  necesitada de puntos, se retiraba del terreno de juego aquejado de  problemas en la parte posterior del muslo dercho. En su lugar entró  Cesc Fábregas, recuperando la disposición habitual utilizada durante  la Eurocopa. 

Al contrario de lo esperado, gracias a la entrada del cerebro del  Arsenal, España comenzó a recuperar el pulso. Bélgica continuaba  agazapada a la espera de contraataques que mantuvieran en vilo la  defensa española, pero la Roja empezaba a rearmar su juego y a jugar  en las cercanías de la portería belga.

El "mago" Iniesta y el "matador" Villla

Precisamente, de las botas de Cesc nació el gol de la igualada.  Fábregas aprovechó un fallo garrafal de la defensa para robar un pase  en la frontal del área y cedió a Iniesta sobre la carrera. El pequeño  genio azulgrana amagó sobre la salida de Stijnen, recortó hasta línea  de fondo y definió a puerta vacía, restableciendo la igualada y dando  nuevos bríos a España. 

Con el empate, la Roja se fue hacia arriba en busca de la  remontada. El centro del campo empezó a surtir de balones a David  Villa, que establecía una enconada lucha con los defensores belgas y  a punto estaba de sorprender a Stijnen con una vaselina desde la  frontal que se marchaba fuera por poco. 

En la reanudación, Bélgica se contagió de la locura y dio a luz a  una fase de ida y vuelta de la que ambos conjuntos salieron empatados  a los golpes. La mejor ocasión, sin embargo, perteneció a Vanden  Borre, que tras una combinación en banda derecha llegó a superar a  Casillas, pero la providencial aparición de Carles Puyol sobre la  línea de gol evitó el mal mayor. 

El susto llevó a España a bajar el ritmo del encuentro. Los de Del  Bosque calmaron las aguas a base de interminables combinaciones al  primer toque en la zona de tres cuartos en busca de la acción que  decantara el partido. 

Hubo que esperar hasta el minuto 88 para que el tanto de Villa  desatara el éxtasis entre las filas españolas, un gol que cobra mayor  importancia con el pinchazo de Turquía en Estonia y eleva la racha de  partidos invicta de la campeona de Europa a 27 partidos.