El Liverpool empata ante el Atlético en el descuento
- Los de Benítez marcan de penalti en el minuto 93 y acaban 1-1 en Anfield
- Maxi Rodríguez adelató a los colchoneros en la primera parte
- Partido de ausencias, Torres en la grada y Agüero en el banquillo
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El encuentro de Anfield Road arrancó triste. Las expectativas creadas por el duelo estelar entre Fernando Torres y Agüero se frustraron, después de que "el Niño" se autdescartara y que Aguiire decidiera relegar al banquillo al "Kun".
Sin fuegos artificales, Liverpool y Atlético intentaron hacer olvidar la ausencia de sus estrellas con el resto de su munición. Quien estaba mejor armado sobre el campo eran los "reds" de Benítez, que llevaron la iniciativa.
Xabi Alonso y Steven Gerrard demostraron su calidad trenzando y adueñándose del centro del campo de Anfield. Enfrente, un acongojado Atlético, con un náufrago Forlán que no conseguía conectar ninguna jugada.
Pese a su demostrada superioridad, el Liverpool no consiguió crear ocasiones de verdadero peligro, malogrando las llegadas al área de Leo Franco. Ni Robbie Keane, que a punto estuvo de sorprender a los colchoneros tras un gran pase del tolosarra en el minuto quince, ni Agger, que yerró tres ocasiones a quemarropa, consiguieron suplir la ausencia de Fernando.
Parecía que los de Aguirre iban a sucumbir en la tormenta londinense, incapaces de levantar cabeza. Sin embargo, cuando peor lo pasaban los colchoneros, Maxi Rodríguez adelantaba a los atléticos. El capitán ofició como tal y, tirando de raza, entró como una exhalación por el centro, aprovechó el pase de Antonio López desde la banda derecha y fusiló a Reina.
- El Liverpool lo intenta sin fortuna, pero el árbitro le regala el empate
El Atlético se iba al descanso frotándose los ojos, contento por el botín que había logrado en unos 45 minutos dominados por el equipo inglés. Tras la reanudación hubo más de lo mismo. Los ingleses dominando el partido pero sin conseguir definir ante un Atlético que aguantaba en defensa con Perea y Assunçao sacando balones.
A falta de goles, el Liverpool achuchaba al Atlético con su espíritu y el apoyo de su afición. Los decibelios subían en Anfield, pero el marcador continuaba a cero para los locales.
La entrada de Agüero, a veinte minutos del final del partido, consiguió calmar a los colchoneros. El ariete, pese a inquietar constantemente la zaga inglesa, no pudo plantarse en el área de Reina con peligro.
Tras aguantar muy bien atrás, la victoria parecía segura para los de Aguirre. Sin embargo, en el minuto noventa y tres del descuento el colegiado se inventó un penalti a favor del Liverpool.
De una caída de Gerrard en el área, que se precipitaba tras intentar alcanzar un balón que pugnaba con Pernía, el árbitro señalaba pena máxima. Al igual que el del Atlético, el capitán de los "reds" también anotaba y conseguía un punto para su equipo con el que nadie contaba ya.