Con Messi basta

• El argentino, autor de los tres tantos de su equipo
• El Barça sentencia la eliminatoria
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Messi fue autor de los tres goles del Barça.

El Barça, salvo milagro, tiene asegurado el pase a los cuartos de final de la Copa del Rey. La victoria por 1-3 en campo del Atlético de Madrid supone un duro varapalo para los de Aguirre, al tiempo que encumbra al brillante protagonista del partido: Leonel Messi.

El delantero argentino dinamitó el partido marcando los tres goles de su equipo y fue una pesadilla para la defensa rival, que terminó desquiciándose ante la exhibición del canterano culé. El Calderón acabó rendido a la perla del Barça y le ovacionó a cinco minutos del final cuando fue sustituido por Pedro.

Y eso que el Atlético empezó con ganas, presionando desde el primer minuto con una llegada de Pongolle y otra de Forlán que Maniche remató de forma algo forzada. Pronto se pasó el efecto sorpresa y el conjunto de Guardiola demostró su fuerza en el centro del campo, con Keita y Yaya Toure como baluartes.

Avisó a los pocos minutos Piqué con un cabezazo en un saque de esquina. Pero fue Messi, el verdadero genio del día, el que se inventó una pared con su socio de banda, Dani Alves, para quedarse sólo ante Coupet y batirlo por bajo. Sólo habían pasado diez minutos.

El guión a partir de ahí debía ser el del dominio atlético y el Barça agazapado atrás, pero más bien fue el de la impotencia rojiblanca ante un rival que cada vez se veía más cómodo pese a las urgencias de los de Aguirre.

El Atlético se desquiciaba, hasta el punto de provocar tres amarillas en apenas cinco minutos. El descanso salvó a los jugadores rojiblancos de quedarse en inferioridad, pero no provocó la reacción esperada por el Calderón, que veía frustrado cómo los suyos seguían igual de incapaces en el segundo tiempo.

Todo pareció sentenciado en el minuto 57' cuando Heitinga derribó dentro del área a Messi y vio la roja directa. El argentino fue el encargado de transformar el penalty: 0-2 y con un jugador menos, un duro lastre para el Atleti.

Sin embargo, fue en ese momento cuando llegó la reacción colchonera y parecía que llegaban con algo más de peligro al área defendida por Pinto. Algo debieron influir también los cambios que se vio obligado a hacer Aguirre, puesto que fue el recién incorporado Ujfalusi el que devolvió las esperanzas, cabeceando a la red un córner sacado por Simao.

El problema era que sólo faltaban 20 minutos para el final y, a pesar de las ganas de algunos como Simao o Forlán, el centro del campo de los de Aguirre se veía impotente ante el manejo del balón del Barça.

Con los locales volcados al ataque llegó la apoteosis de Messi, que recibió en el área pequeña -bordeando el fuera de juego- un centro 'made in' Iniesta, tras el que sólo tuvo que quebrar a Coupet y rematar a placer. Parece fácil porque el 10 del Barça lo sabe hacer así.

Los arreones finales del Atlético no pudieron empañar la fiesta del argentino, ya sustituido, en un partido que no deslució la fama que precedía a los Atlético-Barça anteriores.