El Tau, campeón de grupo tras imponerse en Roma
- El Unicaja vence por la mínima en Zagreb: 76-77
- El Real Madrid cae ante el Armani Jeans Milano (70-61)
- El Tau, campeón de grupo tras imponerse en Roma (96-103)
El Tau Cerámica ha dado la estocada en el partido decisivo ante el Lottomatica en Roma, al imponerse en una prórroga a la que se llegó tras empatar a 85 y en la que, con unos letales Rakocevic y Mickeal, se impuso por siete puntos (96-103), con lo que supera la desventaja que le endosó el equipo italiano en la primera vuelta, en Vitoria (90-93).
El equipo baskonista repitió durante el primer cuarto del choque de Roma casi los mismos errores del encuentro jugado hace dos meses en Vitoria, dejando el dominio de los rebotes a su oponente, y también con fallos importantes en la fijación de las marcas en defensa.
En el segundo cuarto, dominio inicial del Tau Cerámica, que trató de rectificar los numerosos errores cometidos al comienzo del encuentro, especialmente con una ligera mejoría en defensa, hasta lograr una diferencia de seis puntos (31-37, m. 15).
Igor Rakocevic fue el mejor hombre en el tercer cuarto por parte del Tau Cerámica, aunque falló varios triples, hasta dar la iniciativa otra vez al equipo baskonista (58-62, m. 26).Emergió entonces el gran talento ofensivo del exterior esloveno del cuadro italiano, Sani Becirovic, para poner el empate a 62 en el m. 27 del partido.
Tiago Splitter cogió la responsabilidad y se echó el equipo a la espalda en el comienzo del último cuarto (68-73, m. 32), tras una técnica al 'poste' esloveno de cuadro transalpino, Primoz Brezec. Con el equipo local penalizado por sus cinco prematuras faltas (m. 33), el Tau Cerámica fue aumentando su ventaja desde el tiro libre (68-78, m. 34), sobre todo después de un triple de Igor Rakocevic.
El combinado de Vitoria se puso arriba hasta de once puntos en el m. 35 (70-81), pero el Lottomatica no se dio por vencido y recortó hasta ponerse a sólo dos puntos (79-81, m. 37).El empate (85-85) del minuto 40 llevó a ambos equipos a la prórroga, en la que el Tau Cerámica se impuso finalmente por 96-103, gracias al gran trabajo en el tiempo suplementario de dos hombres: Igor Rakocevic y, especialmente, un gran Pete Mickeal.
- Mordente sonroja al Real Madrid (70-61)
Marko Mordente ha condenado al Real Madrid a una derrota impropia de los equipos con elevadas aspiraciones en la Euroliga. Mordente castigó la falta de sangre de un Real Madrid.
El escolta italiano acribilló a los blancos, que controlaron el partido sin problemas durante tres cuartos pese a no hacer nada del otro mundo. El Madrid marcó una máxima distancia de diez puntos (36-46) en el tercer cuarto. Superó el encefalograma plano en el que se sume cuando la dirección recae en Juan Pepe Sánchez -titular en la cancha italiana- con la incorporación de Raúl López antes de entrar en el segundo periodo; manejó la contienda sin excesivos apuros, y alguna licencia fuera de lugar cuando se aspira a la elite continental, hasta el minuto treinta (49-53) y, en el último tramo, regaló el partido.
Van den Spigel es un baluarte desde que se puso la camiseta madridista. Aportó lo mejor de un partido que el Real Madrid sencillamente dejó escapar de forma absurda. Tan absurda como la técnica descalificante que Venson Hamilton cometió, precisamente, por darle un cabezazo más cercano a la frustración que a la violencia a Mordente. Faltaban siete minutos y el Madrid olía el hundimiento.
Mordente acabó con veintitrés puntos. Transformó el triple que decantó el tanteo a favor de los italianos (54-53) en el inicio del cuarto tramo y fue el corazón de los milaneses. Su tarjeta estadística lo dice todo sobre el escolta: veintitrés tantos (1/1 de dos; 5/6 triples; 6/8 tiros libres; 3 rebotes; 1 balón recuperado; 1 asistencia y veintiséis puntos de valoración).
Lo que no explica la estadística del transalpino es la manera de perder del Madrid. Por suerte para el equipo español, el segundo puesto del Grupo D, dominado por el CSKA Moscú ruso, sigue a tiro: incluso si pierde por menos de catorce con el Efes Pilsen la próxima semana entrará como segundo de grupo a la segunda fase de la Euroliga.
- Victoria por la mínima de Unicaja
El Unicaja no lo tenía fácil en la mítica cancha Drazen Petrovic de Zagreb. El Cibona, su titular, no había perdido un encuentro de los cuatro disputados hasta estos momentos y llevaba un casi un año invicto como local en Europa, desde el pasado 31 de enero de 2008 cuando perdió frente al Lietuvos Rytas. El conjunto malagueño rompió las estadísticas.
Pero estos datos no amilanaron al Unicaja, que salió a imponer su ritmo ante un Cibona muy motivado y que, al igual que el conjunto malagueño, lucha por acabar la primera fase como líder del grupo A. El equipo cajista en caso de victoria tenía una oportunidad de ser primero, aunque debería esperar una derrota del Olympiacos con el Maccabi en Tel Aviv (Israel).
Una excelente efectividad en el lanzamiento triple del Unicaja en el primer cuarto le mantuvo en el partido. El ala-pívot estadounidense Marcus Haislip, se mostró infalible de la línea de 6,25 y tres puntos del alero checo Jiri Welsch, le dieron la primera ventaja 16-18, minuto 8.
El Cibona con los aleros estadounidense Alan Anderson y Earl Calloway y la dirección del ex cajista Davor Kus, mostraba sus creencias. La igualdad predominaba hasta que el bajón defensivo de los visitantes propició una ventaja clara del equipo croata 38-30, minuto 17.
El Unicaja tenía muchos problemas en la dirección, ni el estadounidense Omar Cook ni tampoco Carlos Cabezas, lograban imponerse a sus defensores; el rebote era defectuoso y el escolta Thomas Kelati, tirador infalible, no tenía su día, solamente dos puntos. Al descanso 44-36.
En el tercer periodo el Unicaja mejoró muy poco, aunque dejó al equipo croata en tan sólo quince puntos. La endeblez en el rebote tanto ofensivo como defensivo maniataba a los cajistas, que se veían superados por el Cibona, más motivado, 59-53, minuto 30.
Lo ocurrido no hacía presagiar nada bueno. Pero el Unicaja es capaz de lo mejor y de lo peor. Esta vez llegó lo mejor, porque un parcial de 3-16 desmoronó al Cibona. Entre N'Dong, Germán Gabriel y Cook, estos dos últimos con sendos triples, elevaron a los cajistas, 62-69, minuto 35 y parecía sentenciado.
El rebote no existía para el Unicaja pero la remontada había llegado. El partido parecía controlado, aunque en los últimos segundos el Cibona con dos triples, uno de Anderson y otro de Kus, tambaleó el marcador 76-77. Faltaban siete segundos y el ala-pívot Nikola Prkacin, falló el ataque decisivo debajo de la canasta, que hubiera supuesto el triunfo local.