El piloto español Cristóbal Guerrero sigue en coma, pero sin riesgo vital
La mujer y dos hijos de Cristóbal Guerrero se han desplazado a primera hora de la tarde desde el aueropuerto de Málaga al hospital de Chile, donde se encuentra ingresado el piloto, tras el grave accidente que sufrió en la décima etapa del Dakar.
Fuentes médicas del hospital de Copiapó, en el norte de Chile, han asegurado a Efe que el piloto español Cristóbal Guerrero, que sufrió un grave accidente en la décima etapa del Dakar Argentina-Chile, continúa en coma y "sin riesgo mortal".
La directora del hospital en el que se encuentra el piloto, Ana Quiroga, ha asegurado que Guerrero padece un edema cerebral de bastante gravedad. "Recibió todo el golpe en su cabeza, ya que el resto de su cuerpo no tiene traumatismos. Podemos suponer que pudo haber chocado con algo o haber frenado y haber caído lejos y de cabeza", subrayó en declaraciones a Radio Cooperativa.
"El edema cerebral siempre tiene riesgo vital en las primeras horas, por lo que las próximas 24 horas son clave respecto a su evaluación se refiere. Lo que tenemos que hacer es garantizar su estabilización y ante todo resguardar la presión intracraneal. Está en coma y con mucha sedación".
Ha explicado además que el piloto español, quien sufrió pérdida de sangre por un oído a causa del TEC que lo afecta, fue "estabilizado, evaluado y posteriormente ingresado a pabellón para hacerle un drenaje y disminuir la presión intracraneana".
El piloto andaluz sufrió un grave accidente en el kilómetro 160 de la décima etapa al protagonizar una dura caída que accionó su "Iritrack" de emergencia a las 12:38 horas (15:38 GMT) de este martes. Fue socorrido por la organización sólo 28 minutos después por el helicóptero de la organización.
La décima etapa ha sido "la más infernal"del rally Dakar sudamericano y nada más finalizado el accidentado tramo de 476 kilómetros cronometrados con salida y llegada en Copiapó, los organizadores del Dakar decidieron suspender la undécima etapa, prevista para este miércoles entre Copiapó y Fiambalá, debido a las "altas posibilidades de niebla hasta el final de la mañana", según un comunicado.
De este modo, la jornada se convertirá en un tramo de enlace que llevará a los participantes de Chile a Argentina a través del Paso de San Francisco, a 4.700 metros de altura.