El Almería acentúa la crisis rojiblanca

• Los de Aguirre, incapaces de superar a un rival en inferioridad
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El delantero almeriense Uche trata de superar al defensa atlético Ujfalusi.

Un empate en Almería (1-1) acentuó la crisis del Atlético de Madrid, incapaz de conseguir el gol del triunfo en superioridad numérica durante casi cuarenta minutos y que dio un nuevo paso atrás en sus opciones de Liga de Campeones, con otro partido gris ante un rival competitivo.

Sólo intensificó sus ataques en la segunda mitad, en la que sus mejores ocasiones se estrellaron con un par de sobresalientes paradas del brasileño Diego Alves, en el primer duelo de entrenadores mexicanos de la Liga española, entre el local Hugo Sánchez y el visitante Javier Aguirre, que acabó en tablas.

Fiel a su costumbre más reciente, el Atlético salió dormido al partido, un duelo de alta trascendencia para sus aspiraciones y para su tranquilidad tras cuatro derrotas seguidas en 2009. Asfixiado por la intensa presión rival, no encontró su sitio en el inicio del choque, en el que fue superado en cada jugada, en cada salto.

Y, en seis minutos, iba por detrás en el marcador. Un balón largo a la espalda de la defensa atlética y un fallido despeje de cabeza de Antonio López permitieron la progresión por la banda derecha de Juanma Ortiz. Su centro hacia atrás lo enganchó el nigeriano Kalu Uche con un tiro centrado, pero un inesperado error en el bloqueo del argentino Leo Franco le dio otra opción. Ya no falló (1-0).

Aún no había pasado del centro del campo el Atlético, sin opción en los rechaces ni en las segundas jugadas y desbordado cada vez que su rival encontraba la fórmula para habilitar a cualquiera de sus rápidos extremos, sobre todo por la descolocación inicial en el lateral derecho del colombiano Luis Amaranto Perea.

Sólo alguna acción del portugués Simao, como un centro culminado con un tiro altísimo del uruguayo Diego Forlán, calmaron el monólogo ofensivo del Almería hasta que una falta lanzada por Antonio López reactivó al Atlético con el 1-1, cabeceado por Sinama Pongolle por delante de la salida del portero brasileño Diego Alves (m. 21).

Ese gol no sólo equilibró el marcador, sino el juego de ambos equipos, ya sin tanto sufrimiento defensivo para los visitantes y con más preocupación para los locales, como demostró Forlán en una jugada individual. A golpe de zancada y conducción de balón dejó atrás a tres contrarios y encaró al guardameta, pero perdonó el 1-2.

Tampoco salió enchufado el Atlético en la segunda parte, otra vez iniciada con dominio y ocasiones locales, pero sí despertó antes, beneficiado por la doble amarilla al argentino Pellerano en el minuto 53. Inmediatamente después, creó dos ocasiones claras, ambas del argentino 'Kun' Agüero, incluido un cabezazo al larguero.

Pero ni siquiera la inferioridad numérica ofreció un partido cómodo (Carlos García cabeceó demasiado centrado una inmejorable ocasión) ni una ventaja rápida al conjunto madrileño, pero sí intensificó los ataques visitantes sobre la portería rival, como dos disparos lejanos de Forlán y el argentino Ever Banega.

La ofensiva del Atlético, aún demasiado intermitente, se estrelló después contra Diego Alves, salvador con una ágil estirada y con el pie en una acción atacante de 'Kun' Agüero, pero el partido ya se desarrollaba casi completamente en el campo del Almería, al que el paso de los minutos reforzaba su defensa del empate a uno.

Incluso, un contragolpe andaluz alarmó al conjunto madrileño, sobre todo cuando el argentino Pablo Piatti encaraba sin apenas oposición a Leo Franco hasta que Forlán interrumpió la trayectoria del disparo del delantero local, en un tramo final de ocasiones en ambas porterías, en el que el ariete uruguayo probó de nuevo a Diego Alves.

No marcó el Atlético, que ya acumula cinco encuentros seguidos sin ganar, todos los disputados en 2009 entre Liga y Copa del Rey, que ofreció de nuevo síntomas preocupantes, sobre todo por su incapacidad para superar en la segunda parte a un rival con diez jugadores, y que acentuó su crisis de resultados.